Investigan una amenaza de tiroteo en la Universidad Complutense de Madrid

La Policía Nacional y la Universidad Complutense de Madrid investigan conjuntamente la veracidad de una amenaza de tiroteo en las instalaciones del centro de estudios. Según han comunicado a sus alumnos, un individuo “en estado de confusión mental y embriaguez” increpó a varios estudiantes del doble grado de Filosofía y Derecho el pasado jueves 31 de octubre. Este hombre les habría advertido de que no fuesen a clase el martes porque iba a realizarun tiroteo.

Los estudiantes han difundido la información en redes sociales los últimos días, lo que ha motivado el inicio de las pesquisas. La Universidad Compluternse envió el sábado por la tarde un correo a los estudiantes apra informarles de que estaba colaborando con las autoridades competentes en este asunto. “Tened mucho cuidado el martes los estudiantes de la UCM, sobre todo en la Facultad de Filosofía. Se rumorea que un loco tiene pensado hacer un tiroteo ese día”, comentan desde Twitter (ahora X) algunos de los alumnos inscritos en el centro.

El domingo, el Rectorado volvió a escribir a la comunidad universitaria para “transmitir tranquilidad”, en un correo electrónico en el que aseguraban que la UCM trabaja junto con la Policía Nacional en la investigación. Además, está tomando medidas de refuerzo “para garantizar la seguridad en el campus” de Ciudad Universitaria.

En el mismo mensaje, han pedido a los estudiantes que les faciliten “toda la información adicional que se pueda proporcionar a través de esta dirección de correo electrónico: ucys@ucm.es. Asimismo, se ha puesto a disposición del alumnado el Centro de Atención de Emergencias y Seguridad (900 10 03 94 / o por línea interna 1200), así como el Servicio de Atención Psicológica Telemática para todos los estudiantes, PsiCall (913945200).

La decana de la Facultad de Filología, Isabel Durán, también se ha dirigido este lunes a sus estudiantes. Según ha expresado, se ha reunido este lunes con los decanos del resto de facultades y se ha llegado a la conclusión de que “no hay ningún indicio que permita suponer que mañana haya un riesgo por encima de lo habitual”.

Pese a las investigaciones, se ha rechazado cancelar las clases y han recomendado “que la vida en el campus se desarrolle con normalidad, mientras se realizan las últimas averiguaciones para descartar cualquier riesgo”.