Viajar es, para muchos, uno de los mejores placeres de la vida. No solo permite ampliar horizontes o conocer otras culturas y costumbres, sino también desconectar de la rutina y romper con la monotonía. En algunos casos, además, es la mejor forma de retroceder en el tiempo. Es precisamente esto lo que le sucede a los turistas que descubren el espectacular castillo del siglo XVIII que se ubica en España y que se construyó al borde del mar con un claro objetivo: protegerse de los piratas. Ahora esta increíble construcción, que tiene 300 años, nueve habitaciones y 20.000 m², se puede convertir en el hogar de quienes lo deseen, ya que está a la venta.
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Situado en Galicia, junto al Castelo do Cardeal en la ría de Corcubión, esta exclusiva propiedad se conoce como el Castillo del Príncipe, en honor al futuro Rey Carlos IV, y fue construida en 1740, coincidiendo con el reinado de los Borbones en España. Es por ello que su rica historia y los alucinantes detalles que atesora hacen que se trate de una fortaleza que merece la pena descubrir.
Tal es la magnificencia del castillo, que se utilizó como un importante punto de defensa, ya que contaba con 12 piezas de artillería y dio cobijo a más de 80 soldados. Pero dejó de estar en manos del Estado a finales del siglo XIX, momento en el que se transformó en una residencia de lujo, solo al alcance de personas adineradas, como fue el caso del empresario gallego Xosé Ramón Oreiro en 1985. No obstante, conserva el que es una de sus principales señas de identidad: sus preciosas vistas estratégicas al mar. Todo ello sirve para conformar una gran obra de arquitectura.
El precio de la fortaleza convertida en vivienda unifamiliar
El Castillo del Príncipe es una fortaleza histórica en la costa noroeste de España, que ha sido puesta en venta como vivienda unifamiliar, con un precio de 4,7 millones de euros (5,1 millones de dólares). Este inmueble del siglo XVIII, ubicado en Cee, La Coruña (Galicia), fue construido en 1740 en la punta de una península y debe su nombre al hijo del rey Carlos III.
El castillo fue propiedad del Estado hasta finales del siglo XIX, cuando fue vendido en una subasta pública. Décadas después, en 1985, un empresario local lo transformó en una residencia de lujo. La propiedad ha sido incluida nuevamente en el mercado de la mano de la agente Amalia García, de Sotheby’s International Realty en Madrid.
El actual propietario, un empresario originario de La Rioja, la compró en 2006, poco después de una “renovación integral”, según explicó García. Mansion Global no pudo confirmar la cantidad de aquella transacción.
Una extensa propiedad de 3,3 hectáreas
La propiedad abarca aproximadamente 3,3 hectáreas, con una construcción de alrededor de 1.900 metros cuadrados que alberga nueve habitaciones y nueve baños. En su época como fortaleza, llegó a alojar a 88 soldados.
“La residencia cuenta con un patio central y un edificio de una sola planta en forma de U”, explicó Amalia García, agente de Sotheby’s International Realty. “La estructura exterior, finamente labrada en piedra, junto con buena parte de las construcciones interiores, destaca tanto desde el mar como desde tierra firme, donde tenía un foso y un puente que conectaba con el centro de la fortificación”, sostiene.
Catalogada como Bien de Interés Cultural desde 1994, la fortaleza se encuentra frente al Castelo do Cardeal, otra estructura defensiva que protegía la ría de incursiones piratas. Según García, ambas fortificaciones están rodeadas de leyendas; una de ellas narra la existencia de una cadena de hierro bajo el agua que unía los dos puntos, tensándose ante la aparición de barcos enemigos para hacerlos naufragar.