Este 31 de octubre de 2024, la princesa Leonor de Borbón y Ortiz celebra su 19º cumpleaños. La hija mayor del Rey Felipe VI y la Reina Letizia ha crecido bajo el escrutinio de los medios y el interés del público, convirtiéndose en un símbolo de la nueva generación de la Casa Real. Y, por ello, en los últimos meses hemos podido ver cómo su padre delegaba cada vez más en ella ciertas responsabilidades.
Leonor, nacida en 2005 en Madrid, ha tenido una infancia marcada por la presión de ser la heredera al trono y su futuro papel como Reina. Desde pequeña, ha sido vista como la representante de una monarquía que busca modernizarse y conectar con una sociedad en constante cambio. Y su educación ha sido un pilar fundamental en su formación, no solo académica, sino también en valores y responsabilidades.
Cursó sus primeros años de educación en el Colegio de Santa María de los Rosales en Madrid, una institución privada donde recibió una formación integral y completa hasta los 16 años. Durante su etapa en este colegio, se destacó no solo por su rendimiento académico, sino también por su participación en diversas actividades extracurriculares. Gracias a ellas, actualmente Leonor es políglota de cuatro idiomas: inglés, árabe, catalán y español.
En 2021, la institución decidió que debía de continuar su educación en el UWC Atlantic College en Gales, un prestigioso colegio internacional conocido por su enfoque en la educación basada en valores y la diversidad cultural con jóvenes de diferentes partes del mundo. Esta experiencia le ha brindado la oportunidad de estudiar en un entorno multicultural, donde se fomenta la cooperación y la conciencia global. De hecho, su hermana, la infanta Sofía, ha seguido sus mismos pasos y actualmente se encuentra cursando segundo de Bachillerato Internacional en él.
Tras finalizar sus estudios en Reino Unido, la joven siguió el camino de su padre y su abuelo e ingresó en la Academia Militar de Zaragoza, allí juró por primera vez bandera ante los ojos de sus padres. Y, el pasado mes de agosto, comenzó su segundo año de formación militar en la Escuela Naval de Marín, donde en unos meses se embarcará en una travesía en el buque escuela Juan Sebastián Elcano. Y, en 2025, finalizará su instrucción en la Academia General del Aire y del Espacio de San Javier.
Su papel como futura Reina de España
Sin embargo, por ahora la heredera no solo enfoca su carrera a su formación profesional, sino también a comenzar a asumir los retos que van implícitos en su futuro al frente de la monarquía española. El pasado año, la joven juró la Constitución ante las Cortes Generales en su 18 cumpleaños, al igual que ocurrió el 30 de enero de 1986, cuando el entonces príncipe recibió el collar de mano de su padre, el rey Juan Carlos, en una ceremonia similar.
Además, también recibió el Collar de la Orden de Carlos III de manos de Felipe VI, su segunda gran condecoración. Ya que con 13 años recibió de su padre el Toisón de Oro, el más alto reconocimiento de la Casa Real que Felipe recibió del emérito con la misma edad que su hija. Desde entonces, el papel que ha adoptado la hija de la reina Letizia ha sido ejemplar, y la complicidad entre ambos cada vez es más evidente.
Su primer viaje oficial en solitario ocurrió hace unos meses, cuando visitó Lisboa por primera vez sin sus padres. La pasada semana, enmarcado en la agenda de los Premios Princesa de Asturias 2024, Leonor recibió el título de alcaldesa Honoraria de Oviedo y le fue otorgada la Medalla de Asturias. Y durante la gala de premios, conocimos una nueva obligación que su padre ha delegado en ella: concluir la ceremonia y abrir las puertas a los Premios Princesa de Asturias del próximo año.
“Permítanme que comparta con ustedes un pensamiento íntimo: entenderán que les diga que veo con emoción que Leonor, como Presidenta de Honor que es de la Fundación, se encargue de hacerlo a partir de ahora”, explicó Felipe VI durante su discurso. Este es un ejemplo de la nueva visión de la Casa Real por mostrar una institución más feminista, independiente y alejada de los baches que afronta últimamente, unos aspectos promovidos en mayor medida por su madre.
Desde que saltó por los aires el escándalo de las imágenes y audios de Juan Carlos I con Bárbara Rey, el organismo ha intentado desligar la figura de la Princesa de los supuestos delitos cometidos por su abuelo. Sin embargo, según reveló Pilar Eyre en Lecturas, este renunció a la publicación de sus memorias ante la posibilidad de visitar a su nieta durante su estancia en Galicia. Algo que aaparentemente negoció con don Felipe.