Los seis bancos españoles que cotizan en el Ibex 35 han cerrado los primeros nueve meses de 2024 con beneficios récord de 23.656 millones de euros, lo que supone un incremento del 19,7% respecto al mismo período del año pasado, según indican los resultados presentados por las entidades en los últimos días. Este fuerte crecimiento ocurre en un contexto de cambio para el sector, ya que el Gobierno español, con apoyo del PNV, ha introducido enmiendas para que el actual impuesto a la banca, que grava sus márgenes de intereses y comisiones, se convierta en un tributo permanente.
Entre los bancos que forman parte del Ibex 35, Banco Santander continúa liderando en volumen de beneficios con una ganancia neta de 9.309 millones de euros, un 14,3% más que en el mismo período del año pasado. En segundo lugar se sitúa BBVA, con 7.622 millones de euros, lo que representa un notable aumento del 27,9%. CaixaBank ocupa el tercer lugar con un beneficio de 4.248 millones, registrando un crecimiento del 16,1%.
Otros bancos como Banco Sabadell y Bankinter también han mostrado resultados positivos, con incrementos del 26% y 6,8% respectivamente. Sin embargo, el caso más destacado en términos de crecimiento relativo es el de Unicaja, que ha experimentado un aumento del 58,2%, alcanzando un beneficio de 451 millones de euros.
El Gobierno buscará blindar el impuesto extraordinario a la banca
El incremento de beneficios de la banca ha reforzado la postura del Gobierno de Pedro Sánchez en su intención de transformar el actual impuesto temporal a la banca en una medida permanente. A través de una enmienda reciente, el PSOE, con apoyo del PNV, ha registrado una propuesta para que el impuesto al sector bancario sea estructural. Según lo pactado, el nuevo gravamen afecta los márgenes de intereses y comisiones de las entidades y permite una deducción del 25% en el impuesto de sociedades. Adicionalmente, si la rentabilidad de una entidad bancaria desciende por debajo de cierto umbral, se aplicará una deducción extraordinaria.
Esta medida ha sido bien recibida por el PNV, que ha negociado que el tributo se aplique bajo el Concierto Económico del País Vasco y Navarra, integrándolo en los regímenes fiscales forales de ambas regiones. Sin embargo, el Gobierno ha enfrentado algunas resistencias a la hora de convertir en permanente el impuesto a las energéticas, pues el apoyo de otros partidos, como Junts, depende de proteger ciertas inversiones energéticas en Cataluña.
Análisis del tercer trimestre y perspectiva de rentabilidad
Los buenos resultados de los bancos en lo que va del año se deben, en gran medida, a los ingresos generados por los márgenes de intereses en el contexto de tipos de interés elevados. Sin embargo, con la bajada de tipos por el BCE, la banca continúa desafiando este hecho al continuar generando beneficios récord. Solo en el tercer trimestre, las seis principales entidades bancarias generaron 8.367 millones de euros en beneficios. Aunque esta cifra representa una ligera caída del 2,8% frente al segundo trimestre, la rentabilidad del sector sigue siendo destacable y presenta una tendencia estable de crecimiento.
Banco Santander registró un aumento del 1,3% en sus beneficios trimestrales, mientras que otras entidades, como BBVA y CaixaBank, reportaron ligeras caídas del 6% y el 5,8%, respectivamente. Por su parte, Banco Sabadell y Bankinter obtuvieron beneficios trimestrales de 503 millones y 258 millones, con caídas del 5,5% en Bankinter y un crecimiento del 4,1% en Sabadell. Unicaja cerró el trimestre con una contracción del 14,7%, situando sus ganancias en 157 millones.
Los ingresos y el impuesto en la gran banca española
El conjunto de los seis bancos cotizados ha registrado un margen bruto de 92.200 millones de euros entre enero y septiembre de 2024, con un aumento del 10,5% frente al mismo periodo de 2023. Dentro de este total, el margen de intereses se sitúa en 68.542 millones, representando un incremento del 8%. Esta evolución, impulsada por el entorno de altos tipos de interés, ha sido fundamental para sostener el crecimiento de los beneficios, justificando así la imposición fiscal que se está consolidando.
El nuevo tributo aplicado a los márgenes de intereses y comisiones llega en un momento donde el sector bancario español ha demostrado una capacidad de adaptación a las condiciones monetarias recientes, lo que ha mejorado sus márgenes y rentabilidad. Sin embargo, la implantación del impuesto plantea desafíos de cara al futuro, especialmente en un escenario de posibles cambios en las políticas de tipos de interés en la Unión Europea.