La economía española ha registrado un notable crecimiento en el tercer trimestre de 2024, con un aumento del 0,8% en el Producto Interior Bruto (PIB) respecto al trimestre anterior, según datos del Instituto Nacional de Estadística. El avance interanual, del 3,4% con respecto al mismo mes del año previo, representa la tasa de crecimiento más elevada en el último año y medio, un indicio de la solidez que caracteriza actualmente a la economía del país. Según indican desde el Ministerio de Economía, esta mejora responde a una combinación de factores positivos, entre los que destacan el aumento del consumo privado, la recuperación del poder adquisitivo y la estabilidad del mercado laboral.
El consumo privado ha tenido un papel determinante en este aumento del PIB, con un crecimiento del 2,8% interanual. Este comportamiento se explica en gran medida por la ganancia de poder adquisitivo de los trabajadores, que ha aumentado en más de un punto durante el último año. Este aumento de la capacidad de compra ha permitido a las familias aumentar sus gastos en bienes y servicios, una tendencia que ha reforzado el crecimiento económico. Además, la positiva evolución del empleo ha contribuido a estabilizar los ingresos familiares, facilitando una mayor inversión en consumo y fomentando la actividad económica general.
El sector exterior impulsa el crecimiento
Otro factor significativo ha sido el excelente comportamiento del sector exterior, con un aumento de las exportaciones del 5,1% en tasa interanual. Este crecimiento incluye una contribución especialmente destacada de las exportaciones de servicios no turísticos, que han experimentado una expansión notable, multiplicando casi por cuatro su tasa de crecimiento hasta alcanzar un incremento del 12,5%.
La productividad por hora trabajada ha crecido un 2,5% en el último año. Este indicador se suma a la “aportación positiva” de “todas las ramas de actividad económica”, con una contribución particularmente relevante de la industria manufacturera, que continúa mostrando un comportamiento sólido y estable. Este crecimiento equilibrado en diversos sectores refleja un contexto económico favorable, donde la producción y el empleo van de la mano.
La inflación parece contenida
Uno de los elementos más destacables del actual panorama económico en España es la moderación de la inflación, que en octubre se ha situado en un 1,8%, por debajo del nivel de referencia del 2% del Banco Central Europeo (BCE). Esta situación de inflación contenida permite mantener el poder adquisitivo y evita que las subidas de precios impacten negativamente en el consumo. La inflación subyacente, que excluye los precios más volátiles, también muestra una moderación, situándose en el 2,5%. La estabilidad en los precios, junto con el crecimiento económico, crea un entorno favorable tanto para las empresas como para los consumidores, promoviendo una economía más equilibrada y previsible.
En palabras del Ministerio, los datos “reflejan la fortaleza y crecimiento equilibrado de la economía española”, que se está poniendo de manifiesto “por los principales organismos nacionales e internacionales”. Desde el Gobierno consideran que la mejora del mercado laboral y el aumento del poder adquisitivo han permitido que los hogares puedan disfrutar de una mayor estabilidad económica, lo que se traduce en un incremento en el consumo y la confianza.