El mejor truco para secar la ropa sin utilizar la secadora: reduce la condensación y el moho

Un método práctico para evitar la humedad del hogar

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Tendedero. (Adobe Stock)
Tendedero. (Adobe Stock)

Con el otoño y el invierno llega la pregunta más repetida: ¿Está húmeda la ropa o sólo está fría? Durante estas estaciones, donde las temperaturas son bastante bajas, secar las prendas se convierte en toda una aventura. Si las colgamos fuera tardarán días en dejar de estar mojadas y si lo hacemos dentro, lo más probable es que la estancia huela a humedad y que aparezcan el moho y la condensación.

Por qué hay que evitar secar la ropa en interiores sin ventilación

Secar la ropa dentro de casa hace que la humedad ambiental aumente, un factor que favorece la condensación en ventanas y paredes y que, con el tiempo, puede contribuir a la aparición de moho en diferentes áreas. Esto es algo particularmente problemático en climas fríos y húmedos, ya que, las ventanas se abren menos tiempo para que el hogar no pierda el calor, limitando así, la ventilación.

El truco para secar la ropa sin utilizar la secadora

En invierno, la secadora suele ser una herramienta ideal para secar nuestras prendas. Sin embargo, no disponer de ella no es un inconveniente, ya que, hay varios trucos infalibles que nos ayudarán. Uno de los métodos más recomendados es el de la toalla seca: un procedimiento efectivo, rápido y simple. Primero, hay que extender una toalla en una superficie horizontal, como una mesa o el suelo. Después, colocar la prenda húmeda sobre ella y enrollarla firmemente, asegurándose de que está completamente envuelta. Luego, hay que presionar y retorcer ese rollo durante unos segundos. De esta manera, la toalla absorberá la mayor parte de la humedad. Por último, hay que desenrollar y colgar la prenda en un tendedero o una percha.

Este remedio lo que hace es eliminar una gran cantidad de agua de los artículos, lo cual facilita el secado en menos tiempo. Es especialmente útil para prendas gruesas como jerséis o pantalones que tardan más tiempo en secarse y en condiciones de humedad, corren el riesgo de coger un olor desagradable y molesto.

Otros métodos infalibles

Radiador.(Freepik)
Radiador.(Freepik)

Además del remedio de la toalla, existen otros métodos prácticos para lograr que la ropa se seque antes y sin causar problemas de humedad:

  • Elegir un tendedero adecuado: los plegables son muy versátiles y permiten depositarlos cerca de ventanas o en habitaciones con mayor ventilación. Es vital colocarlos en espacios cálidos y, si es posible, donde reciban algo de luz solar.
  • Evitar los radiadores: aunque puede parecer una solución rápida, secar la ropa de esta manera genera más condensación y reduce la eficiencia del sistema de calefacción. Además, algunas telas podrían llegar a encoger o deteriorarse por el calor directo.
  • Abrir las puertas y ventanas: la ventilación es esencial para impedir que la humedad quede atrapada en el ambiente. Crear una corriente de aire natural ayuda a que se disipe rápidamente. Si la ventilación natural es limitada, un ventilador puede acelerar el proceso.
  • Utilizar deshumidificadores: es una excelente herramienta para mantener la humedad bajo control y acelerar el secado de la ropa. Este aparato absorberá el exceso del ambiente.
  • Retirar el exceso de agua: antes de colgar las prendas, es vital intentar quitar todo el agua posible.

Organización del tendedero

La disposición de las prendas en el tendedero también juega un papel importante en el tiempo de secado y la prevención de malos olores. Algunas recomendaciones incluyen:

  • Espaciar las prendas: asegurarse de que haya suficiente espacio entre cada prenda. Esto permite que el aire circule y evita que la ropa se seque de manera desigual.
  • Tender en perchas: útiles para secar camisas, chaquetas y vestidos, porque mantienen la forma de la prenda y facilitan un secado uniforme.
  • Organizar por tamaño: colocar los artículos más grande, como sábanas y toallas, en las varillas superiores y dejar las piezas más pequeñas en la parte inferior del tendedero.

Cómo evitar el moho y los malos olores

Secar la ropa en interiores puede llevar a la formación de moho, sobre todo en espacios mal ventilados o cuando se usa un tendedero muy cargado. Para ello, es necesario:

  • Darle la vuelta a la ropa: cambiar la posición de las prendas en el tendedero cada pocas horas para asegurar que toda la superficie se seque de manera uniforme.
  • Secado horizontal para prendas delicadas: las de lana o aquellas con relleno de plumas deben secarse en horizontal para evitar deformaciones.
  • Evitar los suavizantes: su uso puede retener la humedad en algunas telas, dificultando el secado y favoreciendo los malos olores. Para las toallas y prendas deportivas, es mejor prescindir de estos productos.
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