Óscar Puente admite que un operario de Adif hizo descarrilar el tren para evitar una posible colisión en Atocha

El trabajador decidió forzar su descarrilamiento controlado y así evitar que llegara a una zona de mayor tráfico ferroviario, donde podría haber causado una colisión de grandes proporciones

Guardar
El tren accidentado en el
El tren accidentado en el túnel de AVE que une las estaciones de Atocha y Chamartín. (Xuan Vega / Europa Press)

Durante el pasado fin de semana, un incidente ferroviario de gran magnitud afectó a más ade 15.000 personas en la red ferroviaria de Madrid al descarrilar un tren en el túnel conocido como El Chato, situado entre las estaciones de Atocha y Chamartín. El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha admitido este martes que un operario de Adif tomó la decisión de provocar el descarrilamiento del tren con el objetivo de evitar una colisión potencialmente catastrófica con otros trenes.

El incidente, que tuvo lugar cuando el tren afectado era remolcado hacia el taller, ha suscitado una investigación sobre los motivos que llevaron a su desprendimiento del convoy que lo remolcaba, provocando que quedara descontrolado en el túnel de Chamartín. En declaraciones a la prensa desde IFEMA, donde Puente inauguraba la Feria Internacional del Autobús y el Autocar, el ministro calificó lo sucedido de “verdaderamente grave”, y explicó los motivos que llevaron al operario de Adif a tomar una decisión crítica en cuestión de segundos.

Un análisis del incidente

Según el ministro, el tren estaba siendo remolcado hacia el taller cuando, por razones que aún se desconocen y que están bajo investigación, se soltó del tren que lo llevaba. El tren, sin control, comenzó lo que el ministro describió como una especie de “caída libre” por el túnel de Chamartín. La situación se tornó crítica, ya que el tren podría haber continuado su trayectoria hacia la playa de vías que conecta con la estación de Atocha, una zona concurrida y con alta densidad de tráfico ferroviario.

Ante esta emergencia, un trabajador del Centro de Control de Adif tomó la decisión de desviar el tren hacia una vía secundaria para forzar su descarrilamiento controlado y evitar que llegara a una zona de mayor tráfico ferroviario, donde podría haber causado una colisión de grandes proporciones. “La decisión fue provocar el descarrilamiento del tren para evitar que acabara en la playa de vías y pudiera colisionar con algún otro tren”, explicó Puente.

Puente aprueba la "compra de trenes más grande de la historia": así será la renovación del transporte público ferroviario en 2024

Una decisión controvertida pero necesaria

El ministro reconoció que, en el momento del incidente, no estaba claro si algún tren circulaba por la zona que el tren descontrolado podría haber alcanzado. Sin embargo, subrayó que la decisión del operario de Adif fue prudente, ya que permitió evitar lo que podría haber sido un accidente mucho más grave. “Es evidente que si el tren hubiera continuado en su trayectoria, podría haber alcanzado la playa de vías y haber impactado contra algún tren que pudiera venir en ese momento”, afirmó Puente, quien insistió en que la investigación determinará todos los detalles de lo sucedido.

Puente también señaló que no está aún claro el motivo exacto por el cual el tren se soltó del convoy que lo remolcaba, lo que deja abiertas varias hipótesis que están siendo analizadas por los investigadores. “No puedo exponer las razones en este momento, pero todo se esclarecerá en el informe”, indicó el ministro, mostrando su confianza en que se puedan determinar las causas del incidente para evitar que vuelva a ocurrir.

El impacto del descarrilamiento en los usuarios

El incidente afectó a miles de pasajeros, ya que obligó a cancelar y retrasar numerosos trenes en una de las principales arterias ferroviarias de Madrid. Las conexiones entre Atocha y Chamartín, dos de las estaciones más importantes del país, quedaron temporalmente interrumpidas, lo que generó un efecto en cadena en las líneas de alta velocidad, cercanías y largo recorrido.

Las quejas de los usuarios no tardaron en llegar, ya que muchos se vieron atrapados en las estaciones sin poder continuar con sus viajes. Sin embargo, desde Renfe y Adif, se puso en marcha un plan de contingencia para tratar de minimizar las molestias a los afectados, ofreciendo alternativas de transporte y devoluciones del importe de los billetes a aquellos que no pudieron continuar su viaje.

El propio ministro Puente expresó su comprensión ante el malestar de los pasajeros, reconociendo la magnitud del problema. “Es una situación que afecta a miles de personas, y es comprensible que haya habido molestias. Desde el Ministerio de Transportes trabajaremos para que se restablezca el servicio con normalidad cuanto antes y se eviten incidentes de este tipo”, aseguró.

La investigación en marcha

A día de hoy, las investigaciones siguen su curso, y tanto Adif como el Ministerio de Transportes han iniciado una evaluación exhaustiva de lo ocurrido. Los técnicos están analizando el estado de los trenes, los mecanismos de remolque y las decisiones tomadas en el Centro de Control durante los momentos críticos del incidente.

Por su parte, Puente ha reiterado que no se descarta ninguna hipótesis, aunque se espera que la investigación arroje luz sobre las causas exactas del fallo. “Es un incidente grave, pero confiamos en que las medidas tomadas evitaron una tragedia mayor”, finalizó el ministro, quien destacó la rápida actuación de los trabajadores de Adif en un momento de máxima emergencia.

Guardar