De hace algunos años es polémica la conversación sobre el uso de lenguas oficiales más allá del castellano en situaciones oficiales, institucionales, o profesionales. A pesar de los esfuerzos y el foro que se ha ido construyendo a favor de las lenguas cooficiales de España, aún no son reconocidas por la Unión Europea. Y es que, aunque existan muchas voces a favor de su reconocimiento y normalización de su uso, siguen enfrentándose a una dura oposición dentro del territorio español.
Euskadi es una de esas regiones en las que conviven dos idiomas: el castellano y el euskera. Por lo general, es habitual que en una interacción en la que una de las personas no maneja el euskera se opte por conversar en castellano. A pesar de que es menos común, también en ocasiones pasa lo contrario: uno de los interlocutores puede no dominar el castellano a la perfección y necesitar, debido a esto, mantener la conversación en euskera.
Un ejemplo de esta situación ha ganado atención en redes recientemente después de que el influencer guipuzcoano Beñat Olea, conocido por los consejos sobre el uso del euskera que publica a sus más de 110.000 seguidores en Instagram, relatase y viralizase la situación vivida entre un alumno de máster y la profesora que presidía el tribunal ante el que el estudiante debía defender su TFM debido a las diferencias lingüísticas.
El joven, que según la profesora estaba visiblemente nervioso, confesó “es que me cuesta hablar castellano”, a lo que la profesora respondió “egun on...(buenos días) mis clases de euskera van despacio, lo siento”, pero permitió que el alumno se embarcase en la defensa empleando el idioma con el que puede expresarse con mayor comodidad y libertad. Según la docente, esto logró sacar una sonrisa al angustiado estudiante, que además consiguió aprobar la defensa al no tener que llevarla a cabo en castellano.
La docente, que se puso en contacto con el influencer debido a que su manejo del euskera, aun siendo poco pero, según cuenta, cada vez mayor, se debe en parte al contenido que Olea sube a su perfil en redes. Mostró su agradecimiento al creador de contenido, añadiendo que gracias a sus publicaciones pudo examinar al joven en euskera, facilitando que este pudiera defender su tesis sin ninguna dificultad: “Le he sacado una sonrisa y ha aprobado. Así que eskerrik asko” agradecía la docente a Beñat Olea.
Incluyendo el castellano, la Constitución Española reconoce seis lenguas oficiales
Aunque exista un debate en cuanto al uso oficial y reconocimiento de las leguas oficiales del país más allá del castellano, no se puede negar que muchas personas emplean estos idiomas en su día a día con la misma naturalidad que un madrileño usaría el castellano: forma parte de la realidad de la población de lugares concretos, que debe poder optar a las mismas oportunidades que ciudadanos de habla castellana. Los organismos del Gobierno central y de las Comunidades Autónomas con lenguas cooficiales ya han empezado a tomar medidas: en Baleares, por ejemplo, ya se ofrecen los enunciados de la Selectividad en castellano y en catalán.
Según un estudio realizado por el Clúster de Sociolingüística con el patrocinio del Gobierno vasco, el castellano supone la primera lengua para el 69,94 % de los vascos, frente al 17,82 % cuyo primer idioma es el euskera. Tan solo el 7,01 % declara que utiliza ambas lenguas con la misma facilidad. Además, los resultados reflejan también cómo es el uso de las dos lenguas: la mayoría de encuestados, el 60,9 %, afirma que siempre usa el castellano. Tan solo un 13,8 % dice utilizar más el euskera que la lengua común en toda España, y un 8,2 se considera un bilingüe equilibrado al usar por igual ambos idiomas.