Un coche ¿en llamas? Qué indica una de las señales de tráfico más desconocidas

Cuando una persona está estudiando el manual que le entrega la autoescuela a la que se apunta para prepararse el examen teórico de conducción, lo normal es acabar saturado de ver tantas señales y leer su significado. Además, en una autoescuela, los alumnos se preparan solo para aprobar los exámenes —teórico y práctico—; la experiencia en la carretera será el factor, verdaderamente, relevante, que hace que un conductor aprenda a conducir en todo tipo de situaciones climatológicas, viales, de visibilidad, etc. También, predecir el comportamiento en la conducción de los vehículos de alrededor se adquiere tras muchos meses (o años) de experiencia, y no tras unas clases prácticas y un examen que dura, como máximo, 45 minutos.

Dentro del manual de la autoescuela, hay una serie de señales que se deben aprender, exclusivamente, para aprobar el examen teórico. Porque hay muchos conductores que, después de muchos años de conducción, declaran que hay señales que no han visto nunca en la carretera. Además, hay señalizaciones, muy específicas, sobre un determinado tipo de vehículo, a las que los futuros aspirantes a poseer el carnet de conducir no sacarán demasiado provecho, puesto que conducirán vehículos cuya masa máxima autorizada (MMA) no sea superior a 3.500 kilogramos, es decir, los vehículos que se permiten conducir con el permiso B.

El significado que posee esta señal, según el Reglamento General de Circulación de la DGT —Dirección General de Tráfico—, es: prohibición de paso a toda clase de vehículos que transporten mercancías explosivas o fácilmente inflamables y que deban circular de acuerdo con su reglamentación especial.

Se trata de una señal circular con un contorno rojo y fondo blanco, en la que hay un coche, sobre el que se observa fuego. Esta restricción se aplica a cualquier tipo de vehículo que lleve este tipo de cargamento, con el fin de garantizar la seguridad en la vía y prevenir posibles riesgos de explosión o incendio.

La señal R-109 suele estar colocada en la entrada de infraestructuras críticas, que pueden verse gravemente afectadas por un incendio o una explosión, tales como túneles, puentes, áreas residenciales, y ciertas vías de circulación con restricciones específicas debido a riesgos de seguridad.

Según explica la DGT, circular por un lugar o un carril no permitido constituye una infracción muy grave. De modo, que si haces caso omiso a la señal R-109, incluso llevando material inflamable o explosivo, las sanciones a las que te expones son las siguientes: multa de entre 200 y 500 euros y la retirada de 6 puntos del carnet de conducir.

Acatar las señales de tráfico en España es fundamental para garantizar la seguridad vial y el buen flujo del tráfico. Estas señales proporcionan información crucial sobre las normas y condiciones de la carretera, ayudando a prevenir accidentes y mejorar la convivencia entre peatones, ciclistas y conductores. El respeto a las señales no solo protege la vida y la integridad de todos los usuarios de la vía, sino que también contribuye a la organización del tráfico y a la reducción de conflictos en las vías.