La Comisión de Salud Pública ha aplazado al mes de noviembre su decisión sobre el plan de medidas para prevenir la extensión de infecciones respiratorias. La falta de acuerdo sobre el borrador propuesto por el Ministerio de Sanidad, que incluía el uso de mascarillas según creciese el riesgo de contagio, ha impedido aprobar un documento común para todo el territorio nacional. Han sido las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular las que han puesto pegas al documento, que consideran “poco maduro”, según han remitido a los medios.
La Dirección General de Salud Pública planteaba cuatro escenarios posibles de riesgo (0,1, 2 y 3) que se activarían según creciese la epidemia de gripe. Indicadores como la tasa de incidencia, hospitalizaciones e ingresos en UCI marcarían en paso de uno a otro, en los que se aplicarían unas actuaciones homogéneas en cada comunidad autónoma. El uso de mascarillas para mayores de 6 años se recomendaba en todos los escenarios, si bien su empleo era más o menos estricto según la gravedad de la situación epidemiológica.
El objetivo de esta pauta era evitar el caos vivido en la pasada temporada invernal, en la que Sanidad terminó por imponer el uso de mascarillas en todos los centros sanitarios del país para intentar frenar una epidemia de gripe y covid-19 que saturaba los servicios de todo el territorio.
Para evitar que se repita la misma situación, el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES) invitó a las comunidades a participar en la elaboración de una estrategia conjunta para evitar otro año más de colapso del sistema ante el aumento de los casos. A esta invitación respondieron Asturias, Castilla y León, Cataluña, Galicia, Extremadura, Murcia, la Comunidad Valenciana y La Rioja, cuyos técnicos han colaborado durante todo el año en el desarrollo del plan de actuaciones comunes.
El plan rechazado de Sanidad
El borrador presentado por el ministerio establecía cuatro niveles de riesgo, siendo 0 “muy bajo” y 3 “muy alto” o “pandémico”. Según el contexto, se impondrían una batería de medidas, entre las que destacaban el uso de las mascarillas. Este se restringía a mayores de seis años, con excepciones para personas con dificultades respiratorias o discapacidades que impidan su uso autónomo. En el escenario más grave, se instaba a utilizar el cubrebocas a personas en contacto frecuente con el público, especialmente si interactúan con personas con síntomas o casos confirmados.
Igualmente, promovía otras medidas preventivas como la vacunación, la higiene de manos, la ventilación de espacios y la preferencia por actividades al aire libre. El borrador también contemplaba la promoción del teletrabajo.
No obstante, este jueves varios de los directores generales han considerado que el documento está poco maduro y critican la falta de rigor e improvisación. Otros, por su parte, han cuestionado algunas de las medidas, como dar cinco días de baja a los trabajadores de centros residenciales contagiados que no puedan ser reubicados en otros puestos mientras les dure la infección.
Entre las críticas se encuentra la Comunidad de Madrid, cuya directora general de Salud Pública, Elena Andradas, ha explicado que el documento de Sanidad “adolece de falta de criterio técnico y de cierta improvisación” sobre criterios para la evaluación del riesgo y las recomendaciones ante enfermedades como son las respiratorias agudas en esta temporada que acaba de comenzar. “En ningún momento todavía tenemos una información que pueda ser comparable entre las comunidades autónomas que nos permita realmente poder hacer una evaluación de riesgo e implementar medidas de forma simultánea en las comunidades autónomas”, ha apuntado. La madrileña ha señalado que “se tiene que hacer una revisión profunda de la metodología”.
El secretario de Estado de Sanidad, Javier Padilla, ha criticado la decisión de las comunidades autónomas, pues “frenan el documento redactado por sus propios técnicos para tener por primera vez un plan de actuación común frente a la epidemia de virus respiratorios”. “La irresponsabilidad es enorme y ojalá recapaciten”, ha agregado en redes sociales. La Comisión de Salud Pública intentará llegar a un acuerdo en el mes de noviembre.
*Con información de EFE