Hace ya cuatro años que el príncipe Harrry y Meghan Markle tomaban la decisión de poner rumbo a una nueva etapa y se mudaban a California. Aunque hasta ahora, parecía que el matrimonio no mostraba mucho interés en volver a tierras europeas, la compra de una nueva vivienda en Portugal, indicaría lo contrario.
En un momento en el que la prensa rosa ponía el foco sobre la pareja, por los rumores de una posible crisis, la noticia de la compra de este inmueble vacacional parece calmar las aguas un poco. Estos últimos años, los familiares de la Casa Real británica, acudían a Londres solo por trabajo o ante comunicados importantes como el de la enfermedad que padece el rey Carlos III.
Según ha explicado el periodista Richard Eden, los duques de Sussex disfrutaron el año pasado de unos días en la costa de Portugal. Fueron unas “vacaciones románticas de tres noches” en Melides, una población ubicada en Comporta. Aunque por aquel entonces, no tenían casa allí y pudieron quedarse en casa de su prima, la princesa Eugenie. Entre ambos existe una relación muy estrecha y no es la primera vez que hacen planes y viajes juntos.
Un sueño cumplido
Parece que ahora, van a poder pasar más ratos en familia, pues el nuevo inmueble es una propiedad colindante a la de Eugenia. La princesa de York y su marido viven en el CostaTerra Golf and Ocean Club. Este será también el nuevo lugar de residencia de Harry y Meghan durante sus vacaciones, un complejo lujoso, no apto para todos los bolsillos y con unas buenas instalaciones.
El príncipe Harry y Meghan Markle cada vez están más lejos de los Windsor y además supone el cumplir un sueño para ella, quien siempre había querido adquirir una propiedad así. Pero esta nueva vivienda se encuentra más cerca del que fue su hogar hace unos años. Pero aunque esté más cerca de Reino Unido, la familia ha preferido escoger un país con un clima que les recuerde al de su casa actual y no se caracteriza por los días nublados y la lluvia.
Todavía no se saben muchos datos sobre cómo es la vivienda o el valor de esta, pero todo parece indicar que se trata de una propiedad más pequeña y sencilla que su lugar de residencia habitual en Montencito. Su casa de Los Ángeles, se compró por un valor de 12,4 millones de euros y está distribuida en dos plantas. Su casa de Estados Unidos cuenta 1.300 metros cuadrados, un total de 9 habitaciones y 16 baños, además de varias salas en las que realizar actividades como yoga.
Con la compra de esta nueva vivienda, se podría pensar que los rumores sobre una posible ruptura entre Meghan y Harry no son tan fuertes y que su sueño de formar una familia y vivir juntos todos sigue en pie, ahora en un nuevo país. Además, en el complejo residencial de su nueva vivienda, podrán disfrutar de planes y actividades variadas, pues este cuenta con cafeterías, un spa y un gimnasio muy moderno y campos de golf alrededor.