Ábalos se reunió con el hermano de Delcy en Madrid para abrir un “canal de interlocución” entre el régimen de Maduro y el Gobierno de Sánchez

El nombre de José Luis Ábalos no para de aparecer en los últimos días por las diferentes tramas e investigaciones en las que se está viendo envuelto. Una de ellas es la reunión que mantuvo en 2020 con la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez en el aeropuerto madrileño Barajas, cuando todavía era ministro de Transportes.

La visita no solo fue controvertida por tratarse de un miembro del régimen de Nicolás Maduro, ya que Rodríguez tiene prohibido pisar suelo europeo desde 2018. La dirigente venezolana fue incluida en la lista de sancionados de este país al entender que “ha menoscabado la democracia y el Estado de Derecho en Venezuela, incluyendo la usurpación de poderes de la Asamblea Nacional y su uso para atacar a la oposición e impedir que formen parte del proceso político”, tal como establece una resolución del Consejo de la Unión Europea.

Sin embargo, según una investigación exclusiva llevada a cabo por el diario El Mundo, Ábalos se habría reunido dos meses antes con el hermano de Delcy, Jorge Rodríguez, en una céntrica plaza de la capital. En ese momento ostentaba el cargo de ministro de Comunicación y según este periódico, pidió al exministro abrir “un canal de interlocución” con el Gobierno de Pedro Sánchez y el español se ofreció a convertirse en un interlocutor válido.

El dirigente venezolano supuestamente le transmitió a Ábalos “su preocupación” por los acercamientos de los socialistas con Juan Guaidó, entonces reconocido por la UE como “presidente encargado”.

La visita secreta de Delcy Rodríguez a España en enero de 2020, que generó el escándalo conocido como Delcygate, fue organizada por el entonces ministro de Transportes, José Luis Ábalos, y aprobada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, según un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Este documento, remitido al juez de la Audiencia Nacional que investiga el caso Koldo, detalla cómo se gestó la llegada de la vicepresidenta de Venezuela al aeropuerto de Barajas, a pesar de tener prohibida la entrada en el espacio Schengen.

La UCO descubrió que Ábalos invitó a Rodríguez mediante una carta y que Sánchez dio su visto bueno a través de un mensaje de Whatsapp. En este mensaje, Ábalos informaba al presidente que la vicepresidenta venezolana deseaba reunirse con él de manera discreta, como continuación de un encuentro previo con el ministro de Comunicación de Venezuela, hermano de Rodríguez. La gestión acordada entre ambos gobiernos permitió que la empresa española Duro Felguera cobrara una deuda significativa.

El informe de la UCO revela que los mensajes entre Ábalos y Sánchez fueron descubiertos gracias a una captura de pantalla enviada por Ábalos a su asesor Koldo García. Este hallazgo se produjo durante el análisis de los dispositivos móviles incautados en la investigación, según informó Infobae España.

La polémica se intensificó debido a que Rodríguez, acusada de fraude electoral en su país, tenía prohibido ingresar al espacio Schengen. Sin embargo, el gobierno español defendió que la sala VIP del aeropuerto de Barajas, donde Rodríguez supuestamente pasó la noche tras su llegada, no forma parte del espacio comunitario.