El pasado jueves 10 de octubre, el que fuera el rey del Roland Garros, Rafa Nadal, anunció su retirada. Después de un 2023 marcado por las lesiones, y una vuelta parcial a las pistas en 2024, la leyenda española de la raqueta ha tomado la decisión de dejar el tenis para siempre. Este deporte, que le brindó numerosos títulos y tantas alegrías a los aficionados españoles, queda ahora en su pasado. Sin embargo habrá que esperar al próximo noviembre para presenciar su último torneo (la Copa Davis) antes de colgar la raqueta.
Han sido 23 años de carrera, en los que el mallorquín ha acumulado más de 1.080 victorias (frente a 277 derrotas) y ha conseguido 22 Grand Slam, 14 Roland Garros, dos oros olímpicos (Pekín 2008 y Río 2016), cinco copas Davis, 92 títulos ATP, y hasta el premio Príncipe de Asturias de los Deportes (en 2008), entre muchos otros.
En lo que a su carrera deportiva se refiere, a sus 38 años, parece que Nadal ya no puede conseguir más premios, sin embargo, su trayectoria profesional está lejos de terminar. Sus numerosas inversiones y negocios le han permitido ascender en la lista de las personas más ricas de España. Entre sus proyectos, destaca la Rafa Nadal Academy en Manacor (Palma), la creación de la sociedad NDL Pro-Health en colaboración con una farmacéutica, y su incursión en el sector inmobiliario con Aspemir Unipersonal SL, además de tener participaciones en Mabel Capital. También se ha aventurado en la producción de contenido para Netflix, participando en series como Soy Georgina y Tamara Falcó: La Marquesa.
Todos estos comercios, junto con las competiciones le han llevado a tener un patrimonio de unos 300 millones de dólares, según los datos de Forbes. Y es que el deportista es uno de los tenistas mejor pagados del mundo (actualmente en la sexta posición) con un salario anual de unos 23,3 millones de dólares. Es decir, que muy mal tendría que hacerlo para que le falte el dinero en algún momento del resto de su vida. A él o a sus cinco generaciones posteriores. En este contexto, es normal preguntarse si Nadal tiene derecho a una pensión de jubilación tras su retirada y a cuánto podría ascender.
Qué pensión de jubilación tendrá Rafa Nadal
La carrera de un deportista profesional es una de las más exigentes y breves en comparación con otras profesiones. A menudo, estos atletas deben enfrentarse a la realidad de la jubilación a una edad en la que muchas personas aún están en la cúspide de sus carreras laborales. Por ello, los tenistas cuentan con su propio plan de jubilación de la ATP (Asociación de Tenistas Profesionales).
Esta iniciativa tiene como objetivo proporcionar a los jugadores apoyo financiero durante su la jubilación. El dinero se obtiene de los ingresos que generan los torneo y los jugadores, de los propios premios en metálico y de los derechos de TV o de licencia de los torneos.
El plan, que se puso en marcha en 1990, ofrece a los partícipes una prestación durante 20 años a partir de los 50, según explica BBVA en su blog de jubilación. Por lo que, por el momento Nadal no podría recibirla. El pasado 2023, cada uno de los 265 jugadores retirados que cumplían los requisitos de elegibilidad para obtener esta pensión recibió 113.600 dólares.
Pensión de jubilación pública
Nadal también podrá acceder a una pensión de jubilación pública. Sin embargo, tendrá que esperar a llegar a la edad mínima para recibirla, que es de 65 años (de los que 38 tienen que ser cotizados); o 66 años y medio si se tienen menos años de contribución a la Seguridad Social.
Dependiendo de los años que haya cotizado hasta entonces (mínimo, tienen que ser 15) y de la base de cotización, tendrá una pensión de jubilación u otra, aunque siempre sin llegar a la pensión máxima estipulada en los Presupuestos Generales del Estado. Es decir, que todavía puede seguir contribuyendo a su futura pensión.