Cuando tener empleo no garantiza una vida digna: casi 3 millones de trabajadores en España viven en situación de pobreza

Este fenómeno, conocido como pobreza laboral, afecta al 13,7% de los empleados en España, afectando a sectores como la hostelería, la agricultura o el trabajo por cuenta propia

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Un operario trabaja en una calle de Toledo. (EFE/ Ismael Herrero).
Un operario trabaja en una calle de Toledo. (EFE/ Ismael Herrero).

El mercado laboral en España atraviesa una situación crítica, que afecta diariamente a millones de trabajadores. Pese a los aumentos recurrentes en el importe del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), o la implementación de la última reforma laboral, el informe ‘Pobreza Laboral: cuando trabajar no es suficiente para llegar a fin de mes”, publicado por Oxfam Intermón, revela que casi 3 millones de personas trabajadoras en el país se encuentran en situación de pobreza laboral, es decir, viven por debajo del umbral de pobreza a pesar de estar empleadas.

Este fenómeno afecta al 13,7% de los empleados en España, lo que refleja una profunda desigualdad en sectores clave como la agricultura y el trabajo doméstico, donde tres de cada diez trabajadores viven en condiciones de pobreza. Además, dos de cada diez trabajadores en sectores como la hostelería y la construcción también enfrentan esta precariedad, que trasciende la mera falta de empleo y se convierte en una realidad que golpea incluso a quienes logran insertarse en el mercado laboral.

Agravantes de la pobreza laboral

El informe subraya que esta pobreza laboral no es exclusiva de ciertos sectores, sino que afecta de forma transversal a otros colectivos. Algunos ejemplos pueden ser los trabajadores autónomos y los empleados a tiempo parcial, donde una de cada cuatro personas se encuentra en situación de pobreza, a pesar de estar trabajando. Otro colectivo vulnerable a este fenómeno es el de los trabajadores nacidos fuera de la Unión Europea, que presentan una tasa de pobreza del 30%, casi el doble que la media nacional. Esto refleja las barreras adicionales que enfrentan debido a la falta de protección social, salarios más bajos y condiciones laborales más precarias.

Otro factor determinante en la precariedad laboral es el alto coste de la vivienda. Los hogares en situación de pobreza laboral destinan entre el 67% y el 79% de sus ingresos al pago del alquiler o la hipoteca y a los servicios básicos como electricidad y agua. Este gasto desproporcionado hace que apenas puedan destinar dinero a otros aspectos esenciales, como la alimentación o el acceso a servicios de salud. La situación es especialmente grave en hogares monoparentales, donde el 75% de las personas responsables son mujeres. Estos hogares, junto con las familias con tres o más hijos, enfrentan una mayor vulnerabilidad económica, agravada por los elevados precios de la vivienda y la insuficiente cobertura de las ayudas públicas.

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El abandono escolar afecta a la situación

En el informe se avisa, además, de que el abandono escolar agrava esta situación de precariedad, perpetuando el ciclo de la desigualdad. En España, seis de cada diez personas en esta situación han tenido que abandonar sus estudios por falta de recursos o porque se vieron obligadas a trabajar desde una edad temprana. Esto no solo limita sus oportunidades de empleo en el futuro, sino que consolida su situación de vulnerabilidad.

“Este ciclo perpetúa la desigualdad”, avisan desde Oxfarm Intermón, que también destacan que la pobreza laboral “deja una importante huella emocional”, ya que estos trabajadores “se ven obligadas a vivir para trabajar y no a trabajar para vivir” y a dedicar “íntegramente” sus sueldos a gastos básicos renunciando a cualquier forma de ocio y disfrute del tiempo libre, lo que impacta “fuertemente” en su salud mental. “Vemos el agotamiento y la desesperanza de quienes, a pesar de tener empleo, no pueden avanzar económicamente ni disfrutar de una vida digna”, ha recalcado el responsable de políticas de protección social y empleo de Oxfam Intermón, Alejandro García-Gil.

Además, más de la mitad de los hogares en pobreza laboral (55,3%) ha tenido que renunciar en el último año a servicios de salud esenciales como tratamientos dentales, gafas o seguimiento psicológico, debido a la falta de recursos. Desde Oxfan señalan que “no basta con crear empleo: es necesario garantizar que éste sea de calidad y que permita a las personas vivir con dignidad. Para muchos hogares, un salario no es suficiente si no viene acompañado de condiciones laborales justas, el acceso a una vivienda digna y un sistema de protección social robusto que les permita salir adelante”.

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