El metro es uno de los sistemas de trasporte público más utilizados por los madrileños, acumulando la cifra de 662 millones de viajeros en 2023, según Metro de Madrid. Las consecuencias del tráfico hacen que muchos ciudadanos decidan optar por subir a los vagones de los trenes que recorren de manera subterránea la capital.
La Empresa Municipal de Transportes (EMT) ha decidido incorporar nuevas modificaciones para el Metro de Madrid. Estas modificaciones serán unos semáforos con distintos colores que se podrán ver a partir de los próximos días. Esta nuevo cambio indicará a los pasajeros cuál es el momento perfecto para subirse y bajarse del vagón.
Hasta ahora, los pasajeros han tenido que estar atentos al pitido que hace el metro antes de cerrar las puertas, pero ya no será la única forma para saber cuando hay que acceder o cuando hay que dejar que las puertas se cierren. Ahora, estos nuevos dispositivos ayudarán a todos los pasajeros a entender el funcionamiento de las puertas, según ha informado La Razón.
Cómo funciona
La nueva luz estará compuesta por dos colores (verde y rojo) y dos funcionalidades (fija y parpadeante). Dentro de poco, si nos encontramos esperando al metro, una vez llegue a la estación, la primera luz que se verá será verde parpadeante, que indica que las puertas están en proceso de apretura. Los usuarios deberán esperar a que se abran por completo las puertas para salir o acceder al vagón.
Una vez abiertas las puertas, la luz dejará de ser intermitente para quedarse fija. La luz verde fija indica a los pasajeros que ese es el momento perfecto para salir o entrar al metro porque las puertas están completamente abiertas. A su vez, la luz roja alertará a los pasajeros de que las puertas están a punto de cerrarse y no es el momento de subirse al tren.
El objetivo de esta iniciativa es ayudar a las personas sordas o con discapacidades auditivas a facilitarles un método más seguro para la subida y bajada de los vagones, aunque esta nueva medida será beneficiosa para todos los usuarios que frecuenten el Metro de Madrid. La medida supondrá una indicación de cuál es el momento exacto para acceder al tren, evitando así resbalones o ir corriendo hacia las puertas dejando medio cuerpo fuera del vagón, haciendo que se bloqueen las puertas.
Por otro lado, este nuevo método supondrá que el servicio que se dé sea más eficiente. Si se facilita el tránsito de pasajeros, el tiempo de espera podría disminuir y los horarios de los metros serían más precisos. Asimismo, será beneficioso para las estaciones más céntricas de la capital, evitando que los andenes se saturen por el gran número de pasajeros en las horas puntas (entrada o salida del trabajo).
Igual que en las carreteras
El sistema que se utiliza para controlar la circulación de los coches se verá ahora integrado unos metros por debajo. Un funcionamiento muy sencillo y al que todos estamos acostumbrados. El sistema de colores que se ha instaurado ayudará a todos los viajeros y generará una optimización del flujo, aumentando la seguridad tanto en las estaciones como dentro de los trenes, al igual que sucede en las carreteras.