El hotel de El Algarrobico, una enorme construcción de 24 plantas y 411 habitaciones en pleno Parque Natural de Cabo de Gata-Nijar (Almería), sigue en primera línea de playa desde hace dos décadas, a pesar de ser ilegal. Sin embargo, el edificio construido por la promotora Azata del Sol podría tener los días contados, según ha anunciado este martes la consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía, Catalina García, que ha indicado que “en cinco o seis meses” podría comenzar su demolición.
”Estamos esperando precisamente el pronunciamiento del Ayuntamiento para que, una vez que está anulada la licencia de obras, que ese es el único escollo que existe ahora mismo, podamos demoler”, ha dicho en una entrevista en el programa ‘Andalucía Despierta’ de Canal Sur, según informa Europa Press.
La consejera ha recordado que existe un acuerdo entre la Junta y el Gobierno de España por el que el Ejecutivo asume el coste de la demolición, mientras que la comunidad andaluza hace frente al tratamiento de los residuos y la restauración ambiental de la zona. ”Creo que en seis meses, cinco meses, podemos estar hablando de un plazo parecido, para que podamos empezar con la demolición de algo que creo que hay que devolvérselo a la población y a la naturaleza, que es ese terreno ocupado de una manera ilegal”, ha concretado, para finalizar asegurando que su Consejería es “la primera” que quiere ver la demolición.
20 años en pie pese a las sentencias que indican que es ilegal
El Algarrobico, todo un símbolo de la burbuja del ladrillo y la depredación urbanística de la costa española, se levantó hace dos décadas a pocos metros del mar dentro de una zona de especial protección del Parque Natural del Cabo de Gata, y sigue en pie a pesar de que acumula varias sentencias del Tribunal Supremo y de otros juzgados y tribunales que indican que es ilegal porque invade la servidumbre de protección establecida en la Ley de Costas y porque está construido en una zona no urbanizable. Esa ley establece que no se puede construir nada nuevo en una franja de 100 metros desde la línea de costa y este hotel se encuentra a tan solo 14 metros del mar.
Desde Greenpeace, organización que lleva luchando por la demolición del edificio desde su construcción, valoran positivamente las declaraciones de este martes de la Junta de Andalucía, pero también critican la falta de concreción en la fecha de inicio de esos trabajos al haber hablado de “cinco o seis meses”, al tiempo que aseguran que el Ejecutivo autonómico que lidera el popular Juanma Moreno “está dificultando el proceso”.
“Lo que nosotros estamos esperando es que el Ayuntamiento de Carboneras por fin haga caso a todos los requerimientos del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Y ahora nos estamos encontrando con que precisamente es la Junta de Andalucía la que está retrasando el proceso, pidiendo unos documentos al Tribunal Superior de Justicia que no entendemos [a qué se debe]. Pero en cualquier caso la noticia es muy buena”, dice a Infobae España María José Caballero, responsable de la campaña de costas de Greenpeace. Tal y como ha indicado consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, añade Caballero, “hay un acuerdo firmado y publicado en el BOE entre la Junta y el Ministerio para la Transición Ecológica, con lo cual solo hace falta que el Ayuntamiento de Carboneras anule la licencia de obras porque es un terreno protegido y, a partir de ahí, se podrá proceder a la demolición”, insiste.