La IA, o Inteligencia Artificial, está cada vez más presente en nuestras vidas. Se ha convertido en una acción habitual que los humanos utilicemos herramientas de inteligencia artificial, como ChatGPT, para obtener recetas de cocina con sus ingredientes y preparación completos; ideas sobre regalos para nuestros amigos o familiares, basados en sus gustos; o la resolución, paso a paso, de un ejercicio matemático o de programación. Las posibilidades que ofrecen las plataformas de inteligencia artificial son ilimitadas; en ocasiones, son hasta peligrosas por la creación de contenido o información, que no es, sencillamente, veraz.
La dependencia ante la Inteligencia Artificial, hoy en día, es una muestra de cómo será el futuro. Muchos de los trabajos requerirán del uso de herramientas de inteligencia artificial, y otras profesiones, directamente, se dedicarán a la creación de estas herramientas.
Hay muchos expertos que se atreven a predecir el futuro, dominado por la IA. Una de estas figuras es Bill Gates, cofundador de Microsoft y líder filantrópico, quien se ha convertido en una fuente recurrente con respecto a cómo la Inteligencia Artificial influirá en nuestras vidas. Por un lado, uno de los principales objetivos de estas herramientas es facilitar la vida de las personas; sin embargo, su, cada vez, mayor inclusión en el entorno laboral ha generado preocupación entre los trabajadores, la gran mayoría subcualificados para los trabajos que conllevan el uso de inteligencia artificial, debido a la posibilidad de ser reemplazados por una máquina.
Las ‘apuestas’ de Bill Gates
El magnate tecnológico escribió en su blog personal que la Inteligencia Artificial va a “transformar la educación, la salud y el mercado laboral, abriendo nuevas oportunidades y aportando soluciones a grandes retos”. Asimismo, aseguró que las profesiones que van a salir impunes de este impacto tecnológico serán aquellas relacionadas con la biología, energía y quienes se especialicen en el diseño y programación de la propia IA.
Gates no considera que la Inteligencia Artificial reemplazará, completamente, las funciones de los trabajadores, sino aquellas que sean más rutinarias. “La inteligencia artificial tiene el potencial de permitirnos trabajar menos horas y concentrarnos en las tareas más creativas y significativas, y mediante modelos de IA generativa las máquinas podrían asumir tareas rutinarias o repetitivas como tomar notas durante reuniones y resumir las conclusiones clave”, explicó el empresario estadounidense. La labor que desarrolla la IA, como la automatización de datos, podría permitir que los profesionales implantasen innovaciones en sus respectivas áreas.
Formación en IA, más necesaria que nunca
Relacionado con lo anterior, la única manera para no verse arrastrado por la ola de la Inteligencia Artificial es tener una formación y educación, dirigidas a este ámbito. Bill Gates aconseja formarse en las profesiones anteriormente mencionadas para acceder a más y mejores oportunidades laborales, y sugiere a los padres a que sus hijos “aprendan programación y desarrollen habilidades digitales para estar listos para las oportunidades que surgirán en este entorno en constante evolución, donde es esencial adquirir conocimientos en IA”.
Se desconoce cómo será el futuro a medio-largo plazo, en términos laborales y de Inteligencia Artificial, pero el filántropo norteamericano se atreve a comparar la evolución de la IA con la creación de Internet o los ordenadores. La IA evoluciona a una mayor velocidad que todo nuestro alrededor, por lo que debemos estar preparados para no vernos superados por ella.