Miles de personas se han echado este domingo a la calle para protestar por la subida abusiva de los precios de los alquileres y el problema generalizado por el acceso de la vivienda. Han sido 22.000 asistentes, según Delegación de Gobierno, un número que las organizaciones convocantes suben hasta las 150.000 personas. La lucha la abanderan los jóvenes, mayoritarios en la marcha de Madrid, pero no son los únicos que han acudido a la cita del Sindicato de Inquilinas: adultos, jubilados y familias han acompañado igualmente la manifestación, lo que evidencia que el problema afecta a la población general. El precio de los alquileres en España ha aumentado un 77% en la última década, mientras que los ingresos de los hogares han crecido tan solo un 33%. Actualmente, el alquiler de una vivienda se come casi el 94% del salario de los más jóvenes, lo que hace imposible para ellos ni siquiera plantearse la independencia.
La manifestación partió a las 12:00 horas desde Atocha y culminó horas después en la plaza de Callao. A la movilización han acudido multitud de colectivos afectados por la problemática de la vivienda, desde representantes de la Cañada Real hasta afectados por la línea 7B de Metro Madrid. “¡Fuera fondos buitres de nuestros barrios!”, se corea entre la multitud junto a cánticos a favor de la bajada del alquiler y en contra del “sistema rentista” que ahoga cada vez más a los inquilinos de España.
De la huelga de alquileres a la dimisión de Isabel Rodríguez
Valeria Racu, portavoz del Sindicato de Inquilinas, ha tildado la manifestación de “histórica” y ha llamado a una huelga de alquileres. “A los caseros y la patronal inmobiliaria deciros que se acabó vuestra impunidad, que si seguís subiendo los precios de los alquileres, vamos a dejar de pagaros y no va a haber policía, juzgados ni matones suficientes para desahuciarnos a todas las que estamos hoy aquí”, aseguraba ante los medios minutos antes de que arrancara la manifestación.
Racu también ha aprovechado para lanzar un mensaje a los gobiernos y a los políticos y pedir la dimisión de la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez: “Se acabó vuestro tiempo, no habéis aprovechado ninguna de las oportunidades que os hemos dado. Por eso no queremos más promesas vacías. Exigimos, necesitamos que se bajen los alquileres de una vez por todas [...] y exigimos la dimisión de la ministra de Vivienda, porque es la responsable de todo esto y alguien tiene que asumir responsabilidades. Que se vaya de una vez a su casa a una de las múltiples que tiene”.
El sindicato exige expropiar y recuperar las viviendas de los fondos buitre, así como la clausura de todos los pisos turísticos, que cifran en más de 17.000 solo en la capital, para que vuelvan a funcionar como viviendas habituales. De igual manera, protestan contra los desahucios, que “siguen siendo una problemática real para quienes no tienen control sobre su vivienda, alcanzando los 82 diarios en 2024 mientras el Gobierno central asegura haber terminado con ellos”. En esta línea, piden terminar con esta práctica y la desarticulación de las empresas de desokupación.
“La okupación se está criminalizando y hay que mirar primero detrás de por qué estas personas, estas familias están ahí”, ha señalado Raquel Sacristán, de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH). Sacristán ha cargado contra los jueces “que están haciendo desahucios masivos y el Gobierno no hace nada”, porque “hay un vacío legal”. “A los jóvenes les dicen que no se pueden emancipar, pero es que si a los padres les quitan la vivienda tampoco pueden volver a sus casas.”, ha añadido.