Estas últimas semanas, el concurso de la última edición de Gran Hermano, han estado protagonizadas por grandes cambios en la dinámica del programa. Los participantes han tenido que enfrentarse a situaciones en las que han tenido que tomar decisiones importantes que ponen en juego su continuación en el reality de Telecinco.
En la noche de ayer, jueves 10 de octubre, tuvo lugar una nueva gala de GH, en la que la organización del programa dio a conocer los nuevos cambios que habría para nominar, y que enfrentarían a unos compañeros con otros. Tras conocerse la decisión de la audiencia de expulsar a Juan, este abandonaba la casa. Sin embargo, volvería repescado gracias al poder de la vida extra.
Los concursantes se disponían de nuevo a prepararse para las nominaciones cuando Jorge Javier Vázquez anunciaba el nuevo juego en el que tenían que participar todos los de la Casa de Guadalix. Un nuevo formato de nominación, que finalizó con una gran lista de nominados y que puso en la cuerda floja algunas relaciones entre los concursantes.
Nominación por parejas
Cuando los concursantes creían que no se iban a tener que enfrentar a un nuevo reto, una vez más la organización del reality les complicaba la noche, rompiendo con las estrategias que cada uno había configurado a lo largo de la semana junto a sus compañeros. Al principio salieron nominados Javi, Jorge, Laura y Vanessa, un dos a dos que no acabaría así.
Hasta ese momento de la noche, la paz reinaba en la casa, y a través de la pantalla se podían ver los rostros de tranquilidad de algunos de los concursantes al pensar que ya tenían asegurada una semana más en el formato. Pero las nominaciones no acabarían ahí y es que, según informaba Jorge desde plató, los participantes debían agruparse en parejas, a diferencia de los tríos de la semana anterior.
Esto, cambiaba el rumbo de la noche y la tensión aumentaba entre los concursantes ante las palabras del presentador: “Debéis formar pareja con la persona con la que tengáis más afinidad”. Esta decisión no gustaba mucho a los participantes y, por tanto, generó malestar entre los mismos.
La sala de la decisión
Una vez configurados los dúos, estos debían entrar de uno en uno a la Sala de la gran decisión, un espacio dividido en dos mitades, una para salvados y otra para nominados. Y si hacer parejas ya fue algo complicado, el asunto empeoraba cuando cada miembro de la pareja debía situarse en un extremo u otro de la sala, tomando la decisión de salvarse a uno mismo, o sacrificarse por su acompañante.
Algunos no sabían qué hacer y tuvieron que pensar un poco, pero otros lo tenían claro. Este último caso ha sido el de Javier, quien decía: “Yo me sacrifico. Me nomino” y, por tanto, salvaba a su mujer Vanessa, y dejaba la decisión de su continuación en manos de la audiencia. Daniela también colocaba su cuerpo en la sección roja de la sala, y salvaba a su amiga Maica, quien volvía llorando a la casa.
Poco a poco fueron pasando hasta que, finalmente, quedaron nominados siete de los 17 concursantes. Adrián, Laura, Silvia, Nerea, Edi, Javier, Daniela y Jorge, eran los nombres de las personas nominadas hasta ese momento. “La audiencia podrá salvar a uno de los nominados antes de que acabe la noche”, esas eran las palabras que Jorge Javier pronunciaba minutos después, por lo que había otro giro inesperado en la gala. Finalmente, Jorge fue el concursante elegido por el público para continuar en el programa.