El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ha acudido a la primera sesión del Debate de Política General del Parlament para anunciar una serie de medidas para garantizar la vivienda pública. Entre ellas, ha destacado la creación de un nuevo programa para la construcción de viviendas públicas -un total de 50.000- hasta el año 2030, para lo que la Generalitat destinará 1.100 millones de euros cada año.
Este Debate de Política General, destinado a que tanto el presidente como los grupos parlamentarios expongan sus líneas estratégicas para la legislatura y se decidan en un pleno las propuestas resolutivas, ha iniciado este martes con la comparecencia del líder del Partido Socialista de Cataluña, sin límite de tiempo para dar a conocer sus propuestas en diversas materias. La vivienda, junto con la soberanía fiscal, han sido los temas más destacados en el discurso del President.
El nuevo programa del Govern
Illa ha hecho referencia a diversas reuniones que ha mantenido con los alcaldes de las capitales de provincia y otros municipios. “Los mejores conocedores de las necesidades reales de sus vecinos y vecinas”, algo indispensable para situar al frente de las políticas de la Generalitat el bienestar social. Y, en este sentido, si el objetivo es “conseguir una sociedad más justa”, el asunto más urgente es “el tema de la vivienda”. “No nos podemos permitir que la vivienda condicione el proyecto de vida de las personas, especialmente de los jóvenes”, ha sentenciado en lo que considera “un deber de país”. Por ello, ha insistido en la necesidad de pasar “de las palabras a los hechos”.
En esta línea, Illa a hecho referencia a una espiral de subidas de precios “intolerable” en materia de alquileres, además de una falta de vivienda pública en comparación con la media europea (esta es de un 9%, mientras que en la comunidad autónoma apenas supera el 2%). “Es urgente actuar con toda la ambición y es urgente usar todos los recursos públicos y privados en la construcción de vivienda pública”, ha concluido al respecto, para justificar el nuevo programa para el que, durante su legislatura, la Generalitat invertirá 4.400 millones de euros para construir 50.000 viviendas públicas. “No habrá comunidad autónoma que invierta más dinero que Cataluña”, ha asegurado entre aplausos de la bancada.
Más suelo, más rapidez, más colaboración y más ayudas
Una inversión cuantiosa que el President ha definido como “una política estructural y sostenida”, con “buenas soluciones y buena planificación”. Por ello, ha fijado algunos puntos clave para que esta construcción de la vivienda pública se convierta en una realidad: “Más suelo disponible, más rapidez de ejecución, más colaboración público-privada”, una lista a la que ha añadido también la idea de aumentar las ayudas para el acceso a la vivienda y para el alquiler.
De este modo, Illa ha anunciado la creación de una “reserva pública de solares de Cataluña”, para ayudar a los municipios a promover la construcción de vivienda pública, ya que se “pondrá a disposición” de la misma “todos los suelos disponibles de la Generalitat”. La primera convocatoria, ha anunciado el líder del PSC, será en febrero de 2025, y se priorizará a todos aquellos “colectivos con dificultades de acceso”. Del mismo modo, se colaborará también con el Gobierno para “transformar suelo de su propiedad”.
De cara a la rapidez, Illa ha prometido la creación de una “licencia básica” que se obtendrá para las promociones de vivienda pública, con un único expediente mientras se realizan todas las tramitaciones. Además, ha anunciado un “plan piloto de un Comité de Agilidad Urbanística”, y ha ofrecido “soporte técnico” a todos los ayuntamientos que lo requieran. De cara a la movilización del capital público junto con el privado, “la Generalitat dotará de financiación blanda a toda la promoción de la construcción de vivienda social”.
Por último, el President también ha prometido varios fondos de 500 millones de euros para 100.000 ayudas de acceso a la compra y el alquiler de viviendas en jóvenes y familias, así como actuar también “sobre la regulación de uso de pisos turísticos”. “Esta batalla será larga”, ha terminado, “pero la ganaremos si vamos todos juntos”. Una causa común nacida del “deber de garantizar a todos los catalanes una vivienda digna”.