El Gobierno ha emitido un comunicado este lunes con motivo del primer aniversario de la brutal masacre terrorista perpetrada por Hamás contra Israel el 7 de octubre de 2023. A través del Ministerio de Exteriores, “recuerda y reitera su más tajante condena a los atroces atentados y traslada su solidaridad a los familiares y allegados de las víctimas, recordando especialmente a Maya Villalobo e Iván Illaramendi, los dos ciudadanos españoles asesinados”. Asimismo, “expresa su solidaridad con los familiares de los rehenes que aún siguen secuestrados y exige su inmediata liberación”, al tiempo que considera “necesario un alto el fuego, el acceso de la ayuda humanitaria a los civiles y el fin de la violencia”.
Por último, “reitera su determinación de combatir contra el antisemitismo y toda forma de odio y discriminación” y “se compromete a seguir trabajando por la paz en Oriente Próximo y avanzando en la aplicación de la solución de dos Estados conviviendo en paz y seguridad, la mejor garantía de estabilidad para todos en la región”.
Es el mensaje que traslada en este día tan significativo el ejecutivo de Pedro Sánchez, que no ha agradado precisamente al de Benjamin Netanyahu ya desde una visita a Jerusalén en noviembre en la que el presidente afeó al primer ministro “la muerte de gente inocente en Gaza, incluidos miles de niños”. El segundo choque importante se produjo con motivo del reconocimiento de España del estado de Palestina, algo que para Israel suponía “conceder una medalla de oro a los asesinos de Hamás”. La embajadora en España, Rodica Radian-Gordon, hizo las maletas: “Lamento tener que regresar a Israel por unas decisiones vanas que no van a contribuir a la paz y la seguridad ni van a facilitar la liberación de nuestros 128 secuestrados”.
España, “paraíso para sembrar el odio”
Y, pese a su iniciativa, Sánchez no ha conseguido liderar una posición común en la Unión Europea sobre Israel. Tampoco han favorecido en la relación con este país sucesivas declaraciones de la vicepresidenta Yolanda Díaz, con episodios como su pronunciamiento “Palestina libre desde el río hasta el mar” o referencias directas a la respuesta a los atentados como un “auténtico genocidio”.
Este domingo, víspera de la conmemoración, el gobierno de Netanyahu señaló a España como un “paraíso para sembrar odio e incitar a la destrucción” de su país. El motivo, que Masar Badil, “organización vinculada a grupos terroristas como el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) y Samidoun, ha elegido Madrid para su congreso internacional anual y la manifestación para conmemorar el 7 de octubre”. En una nota, verbalizó su “indignación” y “tristeza” y calificó como “inaceptable” que “una sociedad democrática permita la glorificación del terrorismo y la celebración de los crímenes contra la humanidad”.
Entrevistado este lunes en TVE, Albares ha asegurado no tener noticia ni del congreso ni de la manifestación y se ha apresurado a anteponer que la afirmación de Israel (”paraíso para sembrar odio e incitar a la destrucción”) “está fuera de todo lugar” y que “España es un país de tolerancia”. Defiende el ministro que cualquiera que considere que se puede estar cometiendo un delito de incitación al odio o de antisemitismo con la celebración de esos eventos puede acudir a la Fiscalía.