El detalle del príncipe Guillermo con Kate Middleton cada noche antes de dormir, según la prensa británica

La pareja, formada por Kate Middleton y el príncipe William, es una de las más comentadas desde que estos hicieran pública su relación. Un matrimonio que muchos ven como un cuento de hadas, y que ha permanecido juntos ante todos los baches que se han presentado en los últimos meses.

Se conocieron en 2001 y hoy, 23 años después, siguen enamorados y han conseguido formar una familia numerosa con sus tres hijos, el príncipe Jorge (de 10 años), la princesa Carlota (9) y el príncipe Luis (6). Desde sus inicios, el matrimonio siempre se ha mostrado natural y muy enamorados, con miradas, gestos y muestras de cariño, y han querido dejar ver que el amor sigue presente entre ambos.

Para que una relación funcione, ambos deben poner de su parte y parece que William sabe bien como conquistar a Kate. Fuentes cercanas a la realeza británica han desvelado que ritual amoroso hace el Príncipe de Gales cada noche para que su esposa esté a gusto. Es ya costumbre en la casa de Guillermo y Catalina, que el marido de esta le traiga un obsequio después de que los pequeños de la casa se duerman.

Aunque cuentan con muchos posados, comunicados y actos oficiales, al llegar a casa la familia británica es igual de tradicional que las que no forman parte de la realeza. Y es que, en ocasiones, no hace falta beberse una copa de alcohol solo cuando hay brindis por algo importante.

Un amigo cercano del dúo real ha revelado que William suele llevar una bebida a Kate después de que sus tres hijos están en la cama. Y es que no se sabe con exactitud si se trata de una modesta cerveza, una copa de vino o un cocktail más elaborado. Anteriormente, se creía que la bebida favorita de la princesa era una pinta de Guinness, pero parece que ahora, la princesa opta por algo completamente diferente.

Aunque Kate haya cambiado de preferencias, la tradición de que William llevé la bebida a su mujer con un beso de buenas noches parece que no cambia. Una fuente cercana al matrimonio confesaba: “William le lleva un gin tonic a Kate. Se cuidan el uno al otro, pero de manera diferente”. Así, ambos disfrutarían de un momento íntimo, de relajación y desconexión de todo, como por ejemplo del problema de salud que la de Gales atraviesa y que ha generado tensión en la Casa Real británica.

El amor entre ambos surgió en la Universidad de St Andrews, donde Kate estudiaba Historia del Arte y William Geografía. Poco a poco se fueron conociendo y profundizando el uno en el otro, hasta que en 2011, se dieron el “sí quiero” en la Abadía de Westminster en 2011.

Desde sus inicios se han demostrado lealtad, estando juntos durante los tres embarazos, los problemas de salud y el respeto ante las diferencias que pueda existir entre ambos. Un ejemplo de cariño, tradición y familia. Él ha sabido apoyar a su mujer en los momentos duros y viceversa, pero nunca se han mostrado molestos por tener más o menos protagonismo el uno u el otro.