Los consejos de Bill Gates para mejorar el mundo y evitar que otra pandemia o una guerra nos destruya

Bill Gates, Elon Musk, Mark Zuckerberg… Son muchos los multimillonarios que se dedican a revelar sus trucos para triunfar en el mundo de los negocios y, como ellos, alcanzar el éxito. Pero, en el caso del cofundador de Microsoft, sus consejos van mucho más allá, tal y como ha podido comprobarse en la miniserie de cinco episodios que ha grabado para Netflix, ¿Y ahora qué? El futuro según Bill Gates, estrenada el pasado 18 de septiembre. En ella, el que está consagrado como una de las personas más ricas del mundo, explica cuáles son los retos a los que debe enfrentarse la humanidad si quiere evitar que otra pandemia o una guerra la destruya.

El magnate estadounidense aborda algunas de las cuestiones principales que tendrán que afrontarse en el futuro como, por ejemplo, el cambio climático, la desinformación o la educación. Pero lo cierto es que hay dos asuntos que preocupan a Bill Gates por encima del resto y que señaló en una entrevista para el programa Make It de la cadena estadounidense CNBC: la posibilidad real de que se desate una guerra y el riesgo de que exista otra pandemia global. Aunque ambos ya son dos grandes problemas por sí solos, lo peor que puede ocurrir es que el primero provoque también el segundo.

Hace años que Gates advierte de los posibles desastres que pueden sacudir el mundo. Aunque buena parte de su atención la enfoca hacia los efectos del cambio climático, también destaca el que considera que es un riesgo cada vez mayor: que surjan enfrentamientos armados entre países y, con estos, se desencadene a su vez una pandemia. De ahí que convenga tener en cuenta los consejos que da el multimillonario.

Bill Gates ha alertado sobre los riesgos que enfrenta el mundo debido a “múltiples disturbios que podrían desencadenar una gran guerra”. Según sus declaraciones, incluso si se lograra evitar un conflicto de tal magnitud, existe la posibilidad de una nueva pandemia “muy probablemente en los próximos 25 años”. El empresario hizo referencia a la expresión “gran guerra” aludiendo al hecho de que conflictos como la invasión rusa de Ucrania o la ofensiva israelí contra Hamas se expandan a otras regiones, exacerbando las tensiones geopolíticas y desembocando en una guerra mundial.

En cuanto a la preparación para una futura pandemia, el empresario comparte la preocupación de la comunidad científica, que da por hecho la aparición de otra crisis sanitaria. La cuestión, señala, no es si ocurrirá, sino si los países estarán preparados para enfrentarla, un aspecto que quedó en evidencia durante la pandemia de Covid-19.

En su libro Cómo prevenir la próxima pandemia, el millonario criticó la falta de previsión de Estados Unidos durante la crisis de 2020, a pesar de las advertencias previas de los expertos. “El país que el mundo esperaba que liderara y sirviera de modelo no cumplió con esas expectativas”, afirmó, añadiendo que, si bien se han aprendido algunas lecciones, el progreso ha sido menor de lo esperado.

La relación entre guerra y pandemia también fue uno de sus temas de conversación. Citó el reciente brote de poliomielitis en Gaza, un territorio bajo control de Israel, como ejemplo de cómo la devastación y el caos provocados por los conflictos armados pueden ser el detonante de crisis sanitarias a escala global.

El cofundador de Microsoft ha señalado que las divisiones políticas afectaron la respuesta global ante el Covid-19 y siguen siendo un obstáculo en la preparación para futuras pandemias. Un ejemplo de estos desafíos es el brote de poliomielitis en Gaza, donde las autoridades de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se enfrentaron a dificultades no solo para negociar un alto el fuego que permitiera vacunar a la población, sino también para coordinar el despliegue de equipos médicos en una zona devastada por el conflicto bélico.

En cuanto al papel de Estados Unidos y la pérdida de credibilidad en su sistema sanitario, Gates abordó el tema en su serie documental, al entrevistar a Anthony Fauci, exdirector del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas. El experto, quien estuvo al frente de la respuesta estadounidense durante la pandemia, destacó la responsabilidad moral de los países ricos de compartir recursos con las naciones más pobres para evitar la propagación de enfermedades. Además, subrayó el impacto negativo que tuvo la desinformación y la difusión de bulos, lo que contribuyó al descrédito del sistema de salud, una problemática que también mencionó en una entrevista con The New Yorker.