La exbecaria del musical Malinche, Lesly Guadalupe Ochoa, ha logrado que el juzgado suspenda su declaración del ‘caso Malinche’ tras presentar un parte médico en el que se alega un cuadro de ansiedad, según han informado fuentes jurídicas a Infobae España. La declaración estaba programada para mañana, viernes 4 de octubre, en el Juzgado de Instrucción nº 19 de Madrid.
Ochoa fue la denunciante que dio pie al proceso judicial que comenzó el pasado mes de julio. Nacho Cano fue detenido el día 9 de ese mes y posteriormente puesto en libertad, acusado de contratar presuntamente a inmigrantes en situación irregular para su musical ‘Malinche’ en Madrid, que desde 2022 se presenta en el recinto Ifema.
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Esta iba a ser la primera vez que la mujer iba a declarar para explicar los hechos de su denuncia, pero finalmente ha sido suspendida. Esta también habría sido la primera comparecencia significativa en el caso, en el que hasta la fecha no han declarado ni ella, ni los investigados, ni los otros becarios mexicanos del musical implicados en el procedimiento penal, que se abrió el pasado 30 de julio.
Los 17 estudiantes mexicanos becados fueron llamados a declarar como testigos a finales de agosto de manera urgente tres días antes de que se marcharan de España, pero finalmente no lo hicieron debido a que no se logró citar a una de las investigadas, Roxana Drexel, directora de operaciones de Malinche. Esta ausencia impedía garantizar la posibilidad de contradicción entre las partes, tal como exige la ley.
Trabajo rechaza que los becarios estuvieran sometidos a “una relación laboral encubierta”
La suspensión de la declaración de la exbecaria que denunció a Nacho Cano llega dos días después de que Inspección de Trabajo concluyera que los becarios realizaban “prácticas no laborales” y ajenas al sistema educativo, por lo que no era “necesaria su inclusión en el Sistema de la Seguridad Social”, según el informe de la Inspección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Madrid, al que ha tenido acceso Infobae España. Además, señala que el músico, investigado por un delito contra los derechos de los trabajadores, tampoco tenía a los jóvenes mexicanos sometidos a “una relación laboral encubierta”.
De este modo, Trabajo respalda la versión de Nacho Cano y su defensa, quienes argumentaban que los cerca de veinte becarios no tenían la condición de trabajadores y solo participaban en el musical Malinche de manera puntual como parte de su formación becada. En contraste, los investigadores de la Policía Nacional sostenían que la dirección de la productora Malinche “se estaría beneficiando de la actividad laboral de los becarios, quienes, tras un breve periodo de aprendizaje de canciones y coreografías, pasarían a trabajar” en el musical.
* Con información de EFE