Un cirujano del Royal Sussex County Hospital en Brighton, parte del sistema de salud pública del Reino Unido (NHS), ha utilizado una navaja suiza para realizar una cirugía de emergencia, debido a que “no pudo encontrar un bisturí esterilizado”, como ha detallado el medio británico BBC.
El Hospital Universitario de Sussex, responsable del centro, admitió que las acciones del cirujano estaban “fuera de los procedimientos normales y no deberían haber sido necesarias”. El cirujano implicado estaba operando a un paciente en el Royal Sussex Hospital de Brighton cuando tuvo problemas para encontrar un bisturí. En su lugar, utilizó una navaja suiza que “normalmente utilizaba para cortar fruta para su almuerzo”, según el medio.
A pesar de la gravedad del hecho, el paciente sobrevivió a la intervención, pero documentos internos muestran que los compañeros del cirujano consideraron su comportamiento “cuestionable” y se mostraron sorprendidos de que no pudiera encontrar el equipo adecuado.
La policía de Sussex está investigando este caso en el marco de una pesquisa más amplia que abarca al menos 105 casos de presunta negligencia médica en el fideicomiso del NHS. Se está considerando la posibilidad de presentar cargos por homicidio por negligencia grave y homicidio corporativo en algunos de estos casos.
El cirujano realizó tres operaciones de bajo riesgo en la que los tres pacientes murieron
Además del incidente con la navaja suiza, la BBC ha revelado que el cirujano implicado ha estado bajo escrutinio por su participación en tres operaciones de, supuestamente, bajo riesgo realizadas en un periodo de dos meses, en las que los tres pacientes murieron poco después.
Según investigaciones internas, estos pacientes recibieron “mala atención”, y en uno de los casos, una mujer habría sobrevivido si no hubiera habido complicaciones postoperatorias. La hija de esta mujer, que pidió no ser identificada, comentó al medio previamente mencionado: “No entendíamos cómo murió mamá. Nadie parecía saber por qué la operación no tuvo éxito. Es necesario que se lleve a cabo una investigación exhaustiva de estas muertes, no solo un plan de acción. Eso no es suficiente”.
Los Hospitales Universitarios de Sussex han iniciado investigaciones internas y afirman que, aunque no se plantearon preocupaciones sobre las cirugías en sí, se identificaron áreas para mejorar. Entre las medidas adoptadas están una mejor comunicación con los pacientes antes y después de las operaciones, y una mayor capacitación en cuidados al final de la vida. Además, se han reforzado los procesos de traslado de pacientes entre hospitales para garantizar la seguridad.
El profesor Poston señaló que las operaciones involucradas normalmente solo tienen un 1 % de probabilidad de resultar en la muerte, lo que ha llevado a cuestionar la formación y trayectoria del cirujano. “No conozco a esta persona, pero me preocuparía que hubiera problemas durante su formación y progresión”, comentó Poston.
La Comisión de Calidad de Atención, regulador independiente que se encarga de supervisar la calidad de los cuidados de salud y asuntos sociales en Inglaterra, revisó las muertes y concluyó que no se habían violado las normas, aunque se evidenció la necesidad de mejoras en los procedimientos. Mientras tanto, las operaciones quirúrgicas en el hospital fueron trasladadas temporalmente de Brighton a Worthing, en contra de algunos consejos clínicos. Esta decisión fue defendida por los responsables del hospital como parte de un “proceso minucioso” bajo supervisión ejecutiva.
La policía de Sussex continúa investigando los casos, con la cooperación del hospital.