Un joven coleccionista austriaco de 28 años fue víctima de una estafa al haber puesto a la venta su colección de cartas Pokémon valorada en 110.000 euros. Sin embargo, terminó siendo engañado por un estafador que le pagó con billetes del juego de mesa Monopoly. La estafa ocurrió la semana pasada en la ciudad italiana de Turín. Las autoridades policiales de la ciudad ya se han hecho cargo del caso.
La víctima fue contactada a través de redes sociales por un supuesto comprador, descrito como “un hombre de origen sinti que hablaba perfectamente italiano”, según describe el medio italiano La Repubblica. El estafador mostró gran interés en adquirir la colección, que el joven había puesto a la venta por 110 mil euros, y que incluía cartas de Pokémon raras como Sprigatito, Floragato y Crocalor. Tras negociar una rebaja de cinco mil euros, ambos acordaron cerrar el trato en persona en Turín, como explicó la víctima al medio.
La joven de 28 años viajó desde Viena hasta Piamonte, llevando las cartas en un maletín. Al llegar a la ciudad, se reunió con el supuesto comprador en el distrito de Mirafiori, en las afueras del sur de Turín. Todo parecía en orden: el estafador mostró los 105.000 euros en efectivo, en billetes de 200 euros, que el coleccionista contó uno por uno. “Los billetes eran originales, todos tenían marcas de agua visibles”, explicó la víctima a la policía.
Así se ejecutó la estafa
Sin embargo, mientras el coleccionista se distraía intercambiando bromas con el comprador, un cómplice aprovechó para realizar un cambio de maletines. Después de tomar un café con el estafador, el joven austriaco salió satisfecho, pensando que había cerrado un trato exitoso. Al llegar a su hotel en el centro de Turín, abrió el maletín para revisar el dinero nuevamente y se encontró conque los billetes eran del juego Monopoly, todos falsos. “Quedé muy satisfecho cuando entramos en la habitación, abrí la bolsa para mirar el dinero, pero me di cuenta de que los billetes eran falsos. Todos tenían el sello de Monopoly”, relata al medio.
“Intenté llamar al hombre decenas de veces, pero su número estaba desconectado. Ya ni siquiera recordaba la dirección exacta del lugar donde se realizó el intercambio”, confesó la víctima, claramente angustiada. Sin más opción, acudió a la comisaría más cercana para denunciar el fraude.
La policía italiana sospecha que el estafador podría estar vinculado a uno de los clanes sinti que operan en la región de Piamonte, conocidos por ejecutar estafas, muchas de ellas dirigidas a personas mayores. Estos grupos tienen una larga historia de delitos relacionados con engaños bien elaborados y, en este caso, parece que aplicaron sus técnicas a un mercado lucrativo como es el del coleccionismo de Pokémon.
El mercado de cartas Pokémon, creado hace 25 años por el diseñador de videojuegos japonés Satoshi Tajiri, ha experimentado un auge en los últimos años. Algunas colecciones alcanzan precios que superan los 200.000 euros, lo que ha atraído tanto a fanáticos como a estafadores. Este no es el primer caso en el que los coleccionistas de Pokémon son víctimas de engaños, aunque la mayoría de las estafas suelen ocurrir en transacciones online, lo que hace que este caso en Turín, con un encuentro físico, sea aún más inusual.
La policía continúa investigando y persiguiendo al estafador, mientras que el coleccionista austriaco espera recuperar su valiosa colección de los famosos “monstruos de bolsillo” que han fascinado a varias generaciones desde su creación.