Las empresas de patinetes eléctricos replican a Almeida: “La mayoría de incidencias se produjeron en calles sin infraestructuras”

“Es sostenible, cómodo y barato para los que no podemos permitirnos tener un coche”, explica Carmen, una joven sevillana de 25 años que utiliza el patinete eléctrico casi a diario para ir al trabajo, y que a partir del mes que viene va a tener que volver a coger el autobús “con los retrasos y gentrificación” que eso conlleva. Y es que el Ayuntamiento de Madrid ha decidido retirar los patinetes eléctricos de alquiler de las calles a partir de octubre de este 2024. Una medida que afectará a los 6.000 vehículos operados por las tres empresas concesionarias: Dott, Lime y Tier Mob.

Según el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, esta decisión responde a que las tres compañías no han cumplido con los requerimientos con los que se entregaron las concesiones, “que lo que pretendían era garantizar la compatibilidad de moverse en patinete, pero sobre todo garantizar la integridad y que no hubiera riesgo para la salud de los ciudadanos”.

En 2023, los patinetes eléctricos estuvieron involucrados en 496 siniestros con resultado de lesiones leves y 24 con lesiones graves, según datos de la Policía Municipal de Madrid. Estos incidentes han sido un factor determinante en la decisión del Ayuntamiento de retirar los patinetes de alquiler de las calles. Por ello, la administración local ha subrayado que la medida es una respuesta a la falta de cumplimiento de las condiciones establecidas en las concesiones. Estas condiciones incluían la obligación de las empresas de garantizar la seguridad de los usuarios y de los peatones, así como de mantener un orden adecuado en el uso de los patinetes.

Ya en mayo de 2023, el consistorio modificó el modelo de alquiler de patinetes eléctricos con el objetivo de garantizar mayor seguridad, integración y orden en las calles de Madrid. Se redujo el número de empresas operadoras a tres y se limitó el número de patinetes a 6.000, distribuidos equitativamente entre las empresas que todavía hoy operan. “Pero es un problema de las autoridades saber regularlo, y no tendrían que prohibirlos”, se queja Carmen a Infobae España.

El mismo día en que se conoció la noticia (el pasado 5 de septiembre), una de las compañías que presta este servicio, Lime, publicó una nota de prensa en la que expresaba su sorpresa tras conocer esta medida “a través de los medios de comunicación” y lamentaba que el Ayuntamiento de Madrid no hubiese consultado a las empresas operadoras ni a la ciudadanía que utiliza estos servicios antes de tomar la decisión.

A pesar de lo comunicado por el Consistorio, la empresa asegura que sus operaciones siempre han cumplido con los requisitos establecidos y que han trabajado de manera conjunta para ofrecer un servicio de calidad: “La compañía ha sido proactiva en la colaboración con el Ayuntamiento en todo este tiempo, trabajando conjuntamente para resolver cualquier situación derivada del uso de sus patinetes e implementando mejoras tecnológicas en sus dispositivos para promover un uso responsable y un seguimiento estricto de las normas por parte de los usuarios”, asegura en un comunicado enviado también a Infobae España.

Con respecto a los datos de accidentes de patinetes con los que el Ayuntamiento justifica la medida, Lime cuenta con su propio estudio, en el que destaca que el 99,99% de los 1,69 millones de viajes realizados en 2023 con sus patinetes concluyeron sin incidentes. Además, la compañía subraya que los accidentes con patinetes eléctricos en Madrid disminuyeron un 49% en 2023 en comparación con el año anterior, a pesar del incremento en el uso de estos vehículos, y puntualiza que, en la capital, “la mayoría de las incidencias (el 59,2%) se produjeron en calles sin infraestructuras para bicicletas y patinetes”, lo que es responsabilidad de la propia administración pública.

La compañía también asegura que ha llevado a cabo procesos de diseño y modificación de sus vehículos, así como campañas de sensibilización sobre las normas de seguridad en colaboración con entidades como la DGT.

Lime ha solicitado de manera urgente una reunión con el equipo de Movilidad del Ayuntamiento de Madrid y ha afirmado que presentará las alegaciones correspondientes.

Por su parte, otra de las empresas de patinetes, Dott, señala a Infobae España, en un correo electrónico, que se encuentra “evaluando la situación del servicio y esperando una reunión con el Ayuntamiento antes de tomar cualquier decisión”. “Tenemos la esperanza de que sea posible un diálogo constructivo con el Ayuntamiento para entender los motivos de la decisión anunciada, y aportar soluciones adecuadas para mantener un servicio de movilidad útil a los ciudadanos de Madrid y sus visitantes”, finaliza.