Este es el supermercado más barato de España, según la OCU: está en Barcelona y es un Alcampo

Cada vez es más complicado hacer la compra, ya que los gastos para la alimentación obtienen un presupuesto cada vez mayor, que no todos los hogares pueden permitirse. Y es que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la cesta de la compra ha subido un 2,9% de media en todos los supermercados.

Aunque, este año, la subida ha sido menor con respecto a años pasados (del 12,1% y 12,7%), es un ascenso que se acumula sobre los anteriores. De este modo se pone cada vez más complicada una posible recesión o, incluso, un estancamiento de los precios en el mercado.

El estudio ha analizado 1.070 supermercados de 65 ciudades españolas, el incremento de los precios, e incluso el posible ahorro de grandes cantidades monetarias, en función de la cadena y la zona habitual de compra. Así, se ha descubierto que la cesta más barata se encuentra en la Diagonal de Barcelona, en un hipermercado de Alcampo. Igualmente, dependiendo del lugar de compra se podría ahorrar unos 1.272 euros anuales de media.

Los datos de la investigación se adquirieron de productos de alimentación, droguería e higiene, organizados en cuatro tipos de cestas: la Cesta OCU, la Cesta Fresca, la Cesta de Marcas y la Cesta Económica. Por su parte, la Cesta OCU, que incluye productos de marcas líderes y marcas blancas, alimentos frescos y envasados, entre otros, subió un 2,9% en promedio.

Esto se debe a que dos de cada tres productos de esta cesta han experimentado subidas, muchas superiores al índice de precios al consumo (IPC). Por ejemplo, el aceite de oliva ha sido uno de los productos que más se ha encarecido, con aumentos de hasta un 70% u 80% en algunas marcas. En contraste, los precios de algunos productos, como el aceite de girasol y los tomates de ensalada, han disminuido.

También, en cuanto al comportamiento por tipo de producto, los alimentos frescos muestran un aumento medio del 4,1%, los productos envasados de marcas líderes suben un 3,8% y los productos económicos de marcas blancas crecen un 2,8%. No obstante, los productos de higiene y limpieza registran una disminución del 3,2% en este segmento.

Sin duda, esto sugiere que los supermercados podrían estar intentando competir nuevamente en precios con sus marcas propias, lo que limita las opciones de los consumidores y podría perjudicar a algunas empresas medianas al reducir su presencia en estanterías.

A pesar de que la mayoría de las grandes cadenas continúan con una tendencia al alza, se pueden encontrar algunas que, en contraste, han reducido los precio tímidamente: Aldi (-0,6%), Carrefour Express (-0,9%) y Lidl (-0,7%). Sin embargo, el resto de supermercados han presentado un aumento que va desde un 0,5% en Alimerka hasta un 8,2% en el Hipercor y un 9,7% en el Corte Inglés.

Asimismo, la investigación detalla que en grandes ciudades como Madrid y Barcelona, los ahorros potenciales son significativos. Esto es, en la capital, la diferencia entre el supermercado más caro y el más barato puede alcanzar los 4.148 euros anuales, mientras que en Barcelona los consumidores pueden ahorrar hasta 2.738 euros al año, si optan por un supermercado más barato.

Esto mismo se puede ver en Santa Cruz de Tenerife, Alcobendas-San Sebastián de los Reyes y Las Palmas de Gran Canaria, que tienen una posibilidad de ahorro de unos 1.800 euros anuales. Sin embargo, en Getxo, Cuenca y Ciudad Real, las diferencias de precios son menores, con ahorros que no superan los 550 euros anuales.

De este modo, según el informe de OCU, el establecimiento más económico para la cesta es el Alcampo en la Diagonal de Barcelona, seguido de otros locales de la misma cadena en Vigo y Murcia. Esta tienda obtuvo el mejor resultado en la categoría OCU, además de para la Cesta Económica, por lo que ha demostrado ser la mejor opción para los consumidores.

La digitalización y el uso de tecnologías avanzadas para monitorear precios en tiempo real podrían estar facilitando la competencia desleal entre distribuidores. Estas herramientas permiten a los supermercados ajustar sus precios casi instantáneamente en relación con sus competidores. Es decir, con esta tecnología, podrían saber qué margen de subida está disponible, sin perder a sus clientes.

Finalmente, la OCU han insistido en mantener la reducción del IVA en los alimentos y ampliarla a la carne y el pescado. Además, solicita incrementar la cuantía y el número de beneficiarios del cheque de alimentos vigente, así como pedir a las autoridades que intensifiquen los controles sobre la cadena alimentaria para evitar prácticas especulativas que perjudican a los consumidores.