Continua el juicio por el caso Pélicot. Ayer fue uno de los días más duros para la víctima, que tuvo que visionar, junto con casi todos los acusados, algunos de los vídeos grabados por su marido sobre ella a la que drogaba para violarla y ofrecerla a otros 50 hombres para que también la violaran. Fue el presidente del Tribunal Penal de Vaucluse, Roger Arata, el que solicitó a la mujer la reproducción de los archivos, que le concedió el permiso con la condición de que no se difundieran las imágenes en la sala de retransmisión donde el público sigue la audiencia desde que empezó, así como que tampoco sus hijos estuviesen presentes en el momento de la difusión del material gráfico.
La septuagenaria afirmó que los vídeos podrán “atestiguar” que la violaban cuando estaba “en estado de coma”, fruto de los fuertes somníferos que Dominique le administraba sin que ella lo supiese.
Las excusas que están poniendo los acusados
Uno de los acusados de Aviñón por haber abusado sexualmente de Gisèle Pelicot, Lionel R., reconoció este jueves haber cometido una violación, pero dijo que fue “involuntaria” porque su intención inicial no era esa, aunque se la encontró en estado inconsciente.
Según su versión, Dominique Pélicot le había contado que él y su mujer eran una pareja liberal que querían hacer un trío y que una vez en el domicilio de éstos, hizo todo lo que le decía el marido, sin reflexionar, y sin pararse a pensar si realmente la mujer daba su consentimiento, ya que el marido le había advertido de que se encontraría a su mujer dormida.
“No fue voluntario, en todo caso. Pero estoy de acuerdo con usted en algo. Me tendría que haber ido mucho antes. Tendría que haber reaccionado mucho antes”, ha declarado en su intervención, en la que, además, ha pedido el perdón de la víctima.
Otro de los acusados, Jacques C., un jubilado de 73 años, ha rechazado la acusación de violación argumentando que siempre ha tenido “un gran respeto por la mujer” y que es demasiado mayor para entender de consentimiento: “Yo, por mi edad, no he tenido esa noción de consentimiento, es de otra generación” ha expresado en la sesión de ayer, según ha asegurado el diario El Mundo.
En términos generales, los acusados han apuntado que Pelicot era un “jefe de orquesta” que organizaba los encuentros y muchos han dicho sentirse manipulados y condicionados a actuar como actuaron.
Dominique admite que es un violador ‘como todos los acusados’
Dominiquie ha admitido los hechos en su primera declaración ante el tribunal criminal de Aviñón. “Mantengo que soy un violador, como todos los acusados en esta sala. Sabían todos su estado [el de Gisèle] antes de su llegada, lo sabían todo, no pueden decir lo contrario”, ha asegurado en el estrado y ha argumentado que no esperaba que sus actos alcanzasen tal extensión, pero que una vez comenzó sentía “una adicción” al proceso. “Es abominable, lo dije desde el principio”, ha lamentado ante el estrado.
Según han podido confirmar los investigadores y expertos informáticos implicados en el caso, Pelicot contactaba con los agresores a través de la página web Coco.gg, actualmente cerrada por orden judicial. Sin embargo, ante las preguntas de los abogados de la defensa, Pelicot ha afirmado que él no inició los contactos con “decenas de desconocidos”. “No busqué a nadie, ellos mismos vinieron en mi busca. Me preguntaron y dije que sí. Ellos aceptaron, ellos vinieron. No esposé a nadie para que viniera a mi casa”, ha respondido.