Esta es la fecha en la que cambia la tarifa para las bombonas de butano en España

El precio de la bombona de butano, un producto esencial para muchos hogares españoles, ha vuelto a cambiar, afectando el bolsillo de quienes aún dependen de este suministro energético. Desde el martes 17 de septiembre de 2024, el precio máximo de la bombona de butano ha subido un 3,85%, alcanzando los 15,93 euros. Este incremento, aunque moderado, interrumpe la tendencia a la baja de las dos revisiones anteriores y refleja los vaivenes de los precios de las materias primas en los mercados internacionales.

Esta tarifa, que se renueva de forma bimestral, se actualiza el tercer martes de cada mes impar, es decir, en enero, marzo, mayo, julio, septiembre y noviembre. En este caso, el 17 de septiembre de 2024 fue la fecha en la que entró en vigor la nueva tarifa, que subió debido al aumento en la cotización de las materias primas, concretamente un 13,9%. El ajuste del precio se basa en varios factores que influyen en el coste final de este combustible. Entre ellos, destaca el precio de las materias primas como el propano y el butano en los mercados internacionales, los fletes (coste de transporte) y la evolución del tipo de cambio entre el euro y el dólar. En esta ocasión, el incremento en la cotización de las materias primas fue parcialmente compensado por una caída del 26,4% en los fletes y una leve apreciación del euro frente al dólar (+1,32%).

El precio de la bombona de butano no está liberalizado, lo que significa que su valor está regulado por el Gobierno. La Dirección General de Política Energética y Minas es el organismo encargado de revisar el precio de los gases licuados del petróleo (GLP) envasados, entre los que se encuentra la tradicional bombona de butano, en envases de entre 8 y 20 kilogramos.

El precio se revisa cada dos meses en función de una serie de factores:

• Coste de las materias primas: El precio del propano y butano en los mercados internacionales.
• Coste de los fletes: Transporte de estas materias primas.
• Tipo de cambio euro-dólar: La evolución del tipo de cambio influye en el coste de compra de estas materias primas, que generalmente se negocian en dólares.

Un aspecto importante a tener en cuenta es que, aunque los precios pueden variar al alza o a la baja, el incremento o la reducción en la tarifa está limitado al 5%. Si el aumento o descenso supera este límite, el exceso se acumula y se aplica en las siguientes revisiones. Esta medida pretende evitar fluctuaciones bruscas en el precio que puedan afectar negativamente a los consumidores.

A pesar de la disminución en el uso del gas licuado de petróleo (GLP) en los últimos años, muchas familias en España siguen utilizando bombonas de butano como fuente principal de energía, especialmente en áreas sin acceso a la red de gas natural. Según los datos del Ministerio para la Transición Ecológica, el consumo de bombonas ha disminuido un 25% desde 2010 hasta 2021, pero aún se consumen aproximadamente 64,5 millones de envases de GLP al año en todo el país.

El GLP envasado, principalmente compuesto por butano, sigue siendo una alternativa viable y común para el suministro energético en hogares, sobre todo en poblaciones rurales o en zonas donde no existe infraestructura de gas natural. Sin embargo, su uso ha ido decreciendo progresivamente con la expansión del gas natural y otras fuentes energéticas.

El aumento del precio de la bombona de butano sigue la tendencia general de subida de precios que afecta a muchos productos básicos en España debido a la inflación y a la inestabilidad de los mercados de materias primas. A pesar de que el incremento del 3,85% puede parecer relativamente pequeño, en un contexto de aumento generalizado del coste de vida, se suma a la presión económica que sufren muchas familias.

El precio del butano es especialmente sensible para aquellos hogares que dependen en mayor medida de este suministro energético para calefacción, agua caliente y cocina. Aunque existen ayudas y subvenciones para los consumidores más vulnerables, la subida de los precios energéticos siempre genera preocupación, ya que afecta directamente al coste de los servicios básicos.