Esto es lo que recomienda el Banco de España sobre el fondo de emergencia financiero que debemos tener

Este fondo de emergencia consiste en una reserva de dinero que se destina exclusivamente para cubrir situaciones imprevistas que puedan impactar nuestras finanzas a medio y largo plazo

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Esto es lo que recomienda el Banco de España sobre el fondo de emergencia financiero que debemos tener (Getty)
Esto es lo que recomienda el Banco de España sobre el fondo de emergencia financiero que debemos tener (Getty)

Contar con un fondo de emergencia financiero es uno de los pilares básicos para tratar de asegurar nuestra estabilidad económica, amenazada por los prohibitivos precios de la vivienda y la crisis inflacionaria. El Banco de España, a través de su portal “Finanzas para todos”, resalta la importancia de disponer de este fondo como una medida preventiva clave para afrontar gastos inesperados, evitando recurrir a deudas o comprometer inversiones a largo plazo.

Este fondo de emergencia consiste en una reserva de dinero que se destina exclusivamente para cubrir situaciones imprevistas que puedan impactar nuestras finanzas. Este dinero debe estar fácilmente disponible, preferiblemente en una cuenta a la vista, sin restricciones de acceso, para que podamos recurrir a él en cualquier momento. La función principal de este fondo es actuar como un colchón financiero que nos permita afrontar gastos urgentes o emergencias sin necesidad de recurrir a financiación externa, como créditos o préstamos, los cuales pueden generar intereses adicionales y aumentar el endeudamiento.

Por qué es relevante

El Banco de España insiste en la importancia de contar con este fondo a la hora de conservar la seguridad financiera. Los imprevistos son inevitables y pueden ocurrir en cualquier momento: desde la avería de un electrodoméstico, la necesidad de una reparación costosa del coche, hasta gastos médicos o veterinarios inesperados. No tener acceso a una reserva de dinero puede llevar a tomar decisiones precipitadas y costosas, como pedir un préstamo, usar tarjetas de crédito o incluso vender inversiones, lo que a largo plazo puede empeorar nuestra situación económica.

Si recurrimos a deudas para hacer frente a un imprevisto, nos exponemos a un aumento de los gastos fijos en forma de intereses, algo que es especialmente problemático en momentos de dificultad económica. Los intereses pueden incrementar nuestras obligaciones financieras en un momento en el que, precisamente, necesitamos más flexibilidad para cubrir los gastos esenciales. Además, endeudarnos cuando estamos en una situación de emergencia puede hacer que caigamos en un ciclo de endeudamiento creciente del que es difícil salir.

Otra consecuencia de no tener un fondo de emergencia es que podríamos vernos obligados a vender inversiones a largo plazo, como acciones o fondos de inversión, en caso de tenerlos. . Esto no solo podría generar pérdidas, sino que además estaríamos sacrificando nuestro futuro financiero al interrumpir el crecimiento de esas inversiones. Tener un fondo de emergencia permite evitar esta situación, manteniendo intactos nuestros objetivos de ahorro e inversión a largo plazo.

El Banco de España eleva al 2,8% su previsión de crecimiento para 2024, más que en 2023 y que la estimación del Gobierno.

¿Cuánto deberíamos tener en el fondo de emergencia?

La cantidad ideal que deberíamos tener en el fondo de emergencia varía según nuestras circunstancias personales y económicas. Sin embargo, el Banco de España recomienda que esta reserva debe ser suficiente para cubrir entre tres y seis meses de gastos fijos, es decir, aquellos gastos esenciales que no podemos evitar, como el pago de la vivienda (hipoteca o alquiler), alimentación, servicios básicos (luz, agua, gas) y transporte, entre otros.

Este rango recomendado de tres a seis meses depende de varios factores:

  • Ingresos familiares: Si contamos con ingresos regulares y estables, como un empleo fijo o pensiones, tres meses de gastos pueden ser suficientes. Sin embargo, si tenemos ingresos irregulares o inestables, como ocurre con los autónomos, es recomendable tener un fondo que cubra hasta seis meses de gastos.
  • Responsabilidades familiares: El número de personas a nuestro cargo es un factor clave para determinar el tamaño del fondo de emergencia. Una familia con hijos pequeños o personas dependientes requerirá un fondo más amplio para asegurarse de que se puedan cubrir todos los gastos esenciales.
  • Opciones alternativas: Otro aspecto a considerar es qué alternativas tenemos para obtener dinero rápidamente en caso de necesidad. Si contamos con algún tipo de seguro que cubra ciertos imprevistos o tenemos otras fuentes de ingresos a las que recurrir en situaciones de emergencia, el tamaño del fondo puede ajustarse en consecuencia.

El Banco de España aconseja que el fondo de emergencia esté siempre accesible, por lo que lo mejor es mantenerlo en una cuenta de ahorro o a la vista que permita retirar el dinero sin penalizaciones ni restricciones. Este dinero debe estar separado de las cuentas corrientes o de las inversiones, ya que su objetivo es estar disponible de inmediato para cubrir cualquier urgencia.

Además, es recomendable hacer un seguimiento periódico de este fondo para asegurarse de que sigue siendo suficiente para cubrir los gastos esenciales. A medida que nuestros ingresos y responsabilidades cambian, también debería hacerlo nuestro fondo de emergencia. Si en algún momento utilizamos parte de este fondo, es importante reponerlo lo antes posible para que vuelva a estar disponible en caso de que surjan nuevas contingencias.

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