España ha superado este 2024 el medio millón de donantes de médula ósea registrados. Las cifras, anunciadas este miércoles en el Ministerio de Sanidad, suponen “un logro ineludible” para el Plan Nacional de Médula Ósea (PNMO), según la ministra Mónica García, que en doce años ha quintuplicado el número de donantes registrados.
Superar los 500.000 registrados era uno de los objetivos del PNMO, iniciado en 2012. El impulso en los últimos años ha sido notable: tan solo en los primeros 8 meses de 2024 se inscribieron 20.872 personas al Registro de Donantes de Médula Ósea (REDMO), un 50% más que en el mismo periodo en 2023. También se han multiplicado las donaciones efectivas, de 35 en el 2012 a 396 en 2023, una cifra que se espera superar este 2024, ha asegurado García.
Este esfuerzo conjunto del PNMO y el REDMO ha salvado la vida de 13.573 pacientes en todo el mundo “Solo en 2023, el REDMO coordinó la donación de médula ósea para 637 pacientes residentes en España y para 285 pacientes residentes en otros países”, ha añadido la ministra, que ha resaltado la solidaridad universal de la donación de médula ósea. Igualmente, se ha logrado reducir la mediana de tiempo para identificar un donante compatible, de los 46 a los 28 días, y el nivel de autosuficiencia, del 4 al 28%.
“¿Qué le dices a alguien que te salva la vida?”
En conmemoración del Día Mundial del donante de médula ósea, el director del REDMO de la Fundación Josep Carreras, el doctor Sergi Querol, ha agradecido la generosidad de estas personas que “ofrecen una segunda oportunidad de vida a tantos pacientes que lo necesitan”. La gran mayoría ayudará a personas desconocidas, pues la compatibilidad familiar solo se da en un 25% de los casos, así que nunca llegarán a saber a quién se destinó su donación. De hecho, todos los trasplantes registrados en 2023 se realizaron entre personas no emparentadas, la cifra más alta de la historia española.
Sí ha podido descubrirlo Néstor. Donante de sangre regular, se inscribió al REDMO en el año 2001 y fue clave para ayudar a Elena, paciente de leucemia linfoblástica aguda. Ella descubrió que estaba enferma en agosto del 2000: “Fue un antes y un después, ves la vida de otra manera”, ha contado a la prensa.
El match entre Néstor y Elena tardó unos diez meses en realizarse, sin que ellos supiesen de la existencia el uno del otro. Néstor explica que para él no supuso más que cuatro horas en un hospital. “No cuesta nada y les estás dando un favor a alguien”, añade. Elena, sin embargo, es incapaz de articular palabras para agradecer el altruismo de una persona anónima, a la que por fin ha logrado poner cara. “¿Qué le dices a alguien que te salva la vida?”, se pregunta, entre lágrimas.
“Llenar el mapa” de donantes
El registro español acepta inscripciones de personas entre 18 y 40 años, que permanecen como donantes hasta los 60 años. Pero sin duda son los jóvenes los más solidarios: la edad media de los inscritos está en los 27 años y espera rebajarse en los próximos años, pues cuanto más joven es el donante más tiempo pasará dentro del REDMO y mejores porcentajes de éxito tendrá el trasplante. “Los datos que están viniendo apuntan a que la juventud de las células influye en el éxito del trasplante, o sea que es mejor un donante joven”, afirmó el doctor Quirol. Extremadura es, además, la comunidad con más donantes registrados, gracia a la labor de la Asociación para la Donación de Médula Ósea en coordinación con esta autonomía.
Del más de medio millón de personas inscritas, un 60% son mujeres. Por ello, hacen hincapié en la necesidad de que más varones se animen a convertirse en donantes. El objetivo final es “llenar el mapa de pacientes” para que ”todas las Elenas que estén en un hospital con una indicación de trasplante, en una encrucijada vital, encuentre a su Néstor”, expresó Lola Hernández, coordinadora del PNMO.