El congelador es uno de los electrodomésticos esenciales de un hogar, en él podemos conservar los alimentos durante periodos largos de tiempo. A pesar de su utilidad, suele dar alguno que otro problema y uno de ellos es la acumulación de escarcha, que no sólo es molesta, sino que puede afectar al rendimiento del aparato electrónico, además de ocupar espacio y hacer que la descongelación sea un proceso largo y arduo.
Un congelador sin hielo acumulado en las paredes es algo poco común. Cuando hay tanta escarcha que le quita el espacio a la comida, lo mejor es hacer una limpieza rápida para que el aparato siga funcionando sin problemas. Los fabricantes recomiendan limpiarlos cada seis meses. Pero, dependiendo del nivel de acumulación, puede ser necesario hacerlo con más asiduidad, por ejemplo, cada vez que la capa de hielo supere el medio centímetro.
Por qué se forma la escarcha
Hay varias razones por las que se empieza a formar la escarcha en el congelador, según apunta La Casa del Electrodoméstico, entre ellas:
- Falta de ventilación: es común que se empiece a generar mucho hielo, si el sistema de ventilación del congelador comienza a dar fallos.
- Problemas con la puerta: para que el aparato funcione correctamente, la puerta debe estar aislada y ser estanca. Por ello, si la puerta o las gomas se estropean, el hielo no tardará en salir.
- Exceso de humedad: si hay demasiada humedad dentro del congelador, no tardará en condensarse y poco a poco, creará escarcha.
Cómo evitar que se acumule el hielo
Uno de los consejos más efectivos -y a la vez más difíciles de cumplir- es intentar abrir la puerta del congelador lo menos posible, ya que, cuanto más aire se introduzca en el aparato, más probable será que la humedad entre y se condense. De esta manera, también evitaremos las averías, ahorraremos en la factura de la luz y alargaremos la vida del electrodoméstico. Otra manera de evitar que se dé esta situación, es aumentando la temperatura del congelador, puesto que si está demasiado fría, al entrar en contacto con la de fuera, la escarcha no tardará en aparecer.
Cómo eliminar las placas de hielo
No obstante, hay veces que, a pesar de que haber seguido todos los consejos, no logramos eliminar esas enormes placas de hielo que parecen estalactitas. La forma más común de deshacerse de ellas, es vaciando y desenchufando el aparato hasta se descongele. Sin embargo, hay veces que no tenemos tiempo para ello o que, simplemente, nos da pereza. Otra opción es raspar el hielo con una espátula, pero esta ni es práctica, ni eficaz y además puede dañar el electrodoméstico.
Hay un truco muy sencillo, rápido y sorprendentemente eficaz: utilizar papel de aluminio. Lo primero que se debe hacer es cubrir los laterales del aparato con hojas de papel de plata y asegurarse de que todo el hielo quede cubierto. Después, hay que calentar agua en una cazo y cuando hierva, introducirlo en el congelador y cerrar la puerta. Pasados unos minutos, lo abrimos y retiraremos el hielo con la ayuda de una espátula casi sin esfuerzo.
Si hay zonas en la que la escarcha sigue pegada, se empapa un paño en agua caliente y se restriega por el papel de aluminio. Una vez que la cámara quede libre de hielo, se debe limpiar con vinagre. Este método es efectivo porque el papel de aluminio es un buen conductor del calor y ayudará a repartir la temperatura caliente del paño por todo el aparato, derritiendo el hielo más rápido.