El Gobierno de España ha señalado que no dejará desprotegidos a los dos españoles detenidos en Venezuela, a los que el régimen de Nicolás Maduro acusa de planear ataques terroristas en Venezuela, así como de “generar violencia” y buscar “desestabilizar” el país. En una rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra portavoz, Pilar Alegría, ha garantizado que el Ejecutivo ejercerá la protección diplomática y consular que corresponde en estos casos.
“Hemos solicitado por nota verbal conocer y poder verificar la identidad de estas personas, poder verles y que se nos informen de cuáles son los cargos”, ha añadido. Además, ha insistido en que la embajada española está en contacto con la cancillería de Venezuela. “Estamos verificando toda la información y trasladándosela a los familiares de estas personas”, ha afirmado para aclarar que el Gobierno está “en contacto con los familiares de estas dos personas”.
De esta manera, el Ejecutivo de Pedro Sánchez se reafirma en su reclamo a las autoridades venezolanas de “información oficial y verificada sobre la detención de dos españoles, así como una clarificación de los cargos de los que se les acusa”, tal como han trasladado en los últimos días fuentes oficiales. “La Embajada española en Caracas está en contacto con la cancillería venezolana, a la que ha trasladado que ejercerá la protección diplomática y consular de sus nacionales. Mantenemos a las familias informadas puntualmente”, rematan estas voces gubernamentales.
El Gobierno “rechaza” las acusaciones de Maduro
Además, Alegría ha rechazado este martes las “declaraciones y manifestaciones” formuladas por el líder venezolano, Nicolás Maduro, quien ha tildado de “terroristas” a José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, naturales de Bilbao, en el marco de una supuesta operación de desestabilización organizada por la oposición.
El dictador venezolano aseguró que son agentes “encubiertos” del Centro Nacional de Inteligencia español (CNI), a pesar de que el Gobierno de España lo ha desmentido desde el momento en que se conoció su arresto el sábado pasado. “Es un nuevo tipo de turismo: turismo de aventura. Vienen a poner bombas y matar gente aquí. Turismo explosivo”, ironizó el mandatario en su intervención en el programa Con Maduro+.
Los familiares de los dos detenidos presentaron una denuncia ante la Ertzaintza tras alertar de su desaparición el pasado 9 de septiembre, el mismo día que alertaron, a través de las redes sociales, que los desaparecidos habían sido vistos por última vez en Inírida, Colombia, el lunes 2 de septiembre, rumbo a Puerto Ayacucho, Venezuela. Ambos viajaban sin guía y no tenían noticias desde su última conexión telefónica, producida ese mismo día.