Ana María Vicente, conocida como Anita, la Fantástica, es la mayor estafadora de España. Durante años, engañó a cientos de personas con viajes falsos que nunca llegaron a producirse. A sus víctimas les prometía duplicar su inversión en caso de que el itinerario se cancelase, pero se quedó el dinero. Algunos de ellos llegaron a perder casi medio millón de euros a causa de este fraude.
La catalana se asoció a mediados de los 2000 con la extinta compañía Viajes Marsans. La empresa terminó por quebrar en el año 2010 y a Vicente empezaron a acumulársele la denuncias: le acusaban de estafar a varios clientes con sus servicios de viajes. Según contó a Equipo de Investigación José Lema, una de sus víctimas, la supuesta empresaria vendía “unos packs de viaje de Moto GP y esos packs, si no se llegaban a cumplir, estaban asegurados y nos daban lo pagado más una indemnización”. “Es decir, si el viaje te vale 2.000 euros, tú pagas dos y, si fallaban, te reembolsaban cuatro”, explica al programa de La Sexta, pero nunca les “dio ninguna documentación”. “Solo teníamos lo que nos mandaba por WhatsApp”, cuenta.
Su caso ganó fama tras la aparición el pasado mes de mayo de Vicente en el programa Código 10, emitido por la cadena televisiva Telecinco. Entrevistada por Nacho Abad, la mujer afirmaba haber llegado a ocho sentencias de conformidad sobre un total de once procesos judiciales. Esta afirmación quedó desmentida en directo por el propio presentador.
Ella siempre ha luchado por mantener su fachada. En sus redes sociales, muestra sus visitas a las principales ferias y congresos de turismo, a la vez que alardea de sus lujosos viajes y sus importantes contactos con los principales empresarios del sector turístico. Incluso afirma haber atendido al funeral de Emilio Botín, presente del Banco Santander, o que Amancio Ortega, propietario de Inditex, le envía ramos de flores. Equipo de Investigación ha demostrado que esta lujosa vida es falsa.
16 meses de cárcel
Las incontables denuncias de sus víctimas, que perdieron miles de euros por culpa de Vicente, llevaron a la mayor estafadora de España a pasar un tiempo en prisión. Su estancia, sin embargo, fue breve: tan solo estuvo 16 meses. Al salir, envió un mensaje de WhatsApp a sus contactos, intentando explicar con otra mentira por qué no les había devuelto el dinero en más de un año.
“Todos vosotros sabéis de mi retiro voluntario estos últimos 471 días, igual que sabéis de mi lucha contra el cáncer”, contó. Ana María Vicente intentó justificar los 471 días que estuvo ausente, diciendo que estaba en Houston tratándose un cáncer. “No estaba preparada para sentir la muerte tan de cerca”, expresó, quien consiguió su objetivo de esconder su pasado.
Pero el paso por prisión no supuso un escarmiento. Nada más salir, puso en marcha una nueva empresa, Aúpa Travel, a la que se unió un socio: Ramón. Su papel consistiría en expandir el negocio por Galicia. La estafadora, a sus 53 años, acumula ya diez detenciones, 35 condenas y cinco denuncias que están a la espera de juicio. Pese a ello, no ha parado de delinquir.
“Es una sociópata”
Su afán delictivo parece venir de lejos. Así lo afirma un antiguo compañero suyo de trabajo a Equipo de Investigación. Ana María Vicente trabajó hace 22 años en una fábrica del municipio del Vallés (Cataluña), en la que estuvo desde 1992 hasta 2004.
Si bien su antiguo colega afirma que Vicente era “siempre la más buena y la más bonica de todos”, que nunca dudaba en ayudar al prójimo, el relato cambia cuando recuerda por qué la echaron: Ana robó de la caja de la empresa 257.645 euros cuando se encargaba de la contabilidad. Por estos hechos le condenaron a nueve meses de prisión. “Esa chavala no está bien de la cabeza, no lo ha estado nunca. Tú notas que es una sociópata”, asegura a Equipo de Investigación.