La expresidenta de Adif, Isabel Pardo de Vera, ha declarado ante el juez de la Audiencia Nacional que cuando acudía al Ministerio de Transportes bajo el mandato de José Luis Ábalos se encontraba “frecuentemente” con el presunto comisionista del caso Koldo, el empresario Víctor de Aldama. En concreto, lo veía en la tercera planta de la sede de Nuevos Ministerios, donde también se encontraba el despacho del exministro socialista, según informan fuentes jurídicas presentes en la declaración.
El juez Ismael Moreno ha continuado este lunes con la ronda de declaraciones de testigos en el denominado caso Koldo. Ha sido el turno para la propia Pardo de Vera y otros dos altos cargos de Adif, a quienes el magistrado citó como testigos para indagar en la compra de 12,5 millones de euros en mascarillas a la empresa de la trama, Soluciones de Gestión, por parte del ente público.
Durante su interrogatorio, Pardo de Vera ha ratificado parcialmente su declaración ante la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Ha reiterado que hubo “urgencia” por adquirir mascarillas, pero ante el juez no ha mencionado explícitamente órdenes del José Luis Ábalos, a quien sí nombró ante los investigadores.
Preguntada por cómo estableció Adif contacto con Soluciones de Gestión, la testigo ha detallado que fue Puertos del Estado, el organismo dependiente de Transportes que primero contrató a la empresa, quien le proporcionó a través de Whatsapp el número de teléfono de contacto.
Las partes también han formulado preguntas a la expresidenta de Adif sobre la reciente auditoría realizada por el actual Ministerio de Transportes bajo el mando de Óscar Puente. La testigo ha dicho que el informe está “incompleto”. Otro de los comparecientes, el directo financiero y de control de Adif, Manuel Fresno, ha negado que sean suyas algunas manifestaciones que se le atribuyen en el informe y ha indicado que se limitó a proporcionar información “comercial”.
Las acusaciones populares han preguntado a Pardo de Vera si conocía al presunto comisionista de la trama, Víctor de Aldama, a lo que ha respondido que sí y ha añadido que lo veía “frecuentemente” cuando ella iba a despachar con el entonces ministro José Luis Ábalos en la sede del Ministerio de Transportes. En uno de sus autos, el juez instructor, Ismael Moreno, hizo constar que De Aldama tenía un “pase especial” en la sede de Nuevos Ministerios y tenía información privilegiada y anticipada sobre los procesos de adjudicación que estaban por salir.
Piden la imputación del expresidente de Puertos
Una de las acusaciones populares personadas en el caso, la asociación Hazte Oír, ha solicitado formalmente la imputación del expresidente de Puertos del Estado, Francisco Toledo, quien compareció como testigo en la Audiencia Nacional la pasada semana. En el escrito remitido al juez, la acusación alude a la declaración del ex secretario general de Puertos Álvaro Sánchez Manzanares, investigado en la causa, que declaró que hubo “ciertas reticencias por parte de su equipo sobre la decisión de adjudicar el contrato investigado”.
El ente público, según habría afirmado Sánchez Manzanares, siguió adelante con la adjudicación “por decisión” de Francisco Toledo.