Nueva polémica en Buckingham Palace: los activistas exigen que la Guardia del Rey deje de utilizar sombreros de piel de oso

Se necesita un oso entero para la creación de cada uno de estos exclusivos sombreros

La Guardia del Rey asiste al desfile Trooping the Color en Londres, Gran Bretaña, el 15 de junio de 2024. (REUTERS/Chris J. Ratcliffe)

Si hay un país que respeta las tradiciones, ese es Reino Unido. Algunas de ellas evolucionan, como la hora del té, que se ha ido adaptando a las necesidades de la sociedad; sin embargo, hay otras que respectan a la monarquía que parecen haberse quedado congeladas en el tiempo. Cuando visitamos ciudades como Londres, es imprescindible acudir a ver los famosos cambios de guardia que ocurren en residencias como St. James Palace o el propio Buckingham Palace; y es que, la disciplina, los movimientos y el aspecto de la Guardia del Rey son dignos de admiración.

Aunque esto último es lo que más indigna a los activistas por los derechos de los animales, ya que lo más destacado de su uniforme es el largo sombrero de piel de oso canadiense que utilizan. Para poder realizar uno de estos gorros, los cuales son conocidos como bearskins, es necesario la utilización de un animal entero, algo que enfurece cada vez más a asociaciones como PETA. Según indica la organización, “esto ya no es solo un problema de bienestar animal, sino también y sobre todo un problema de poder adquisitivo, ya que estos sombreros son financiados por los contribuyentes británicos”.

Pero, ¿cuánto cuesta a los británicos cada uno de estos sombreros utilizados por la Guardia del Rey? PETA ha realizado un estudio en el que analizan los datos ofrecidos por el Ministerio de Defensa (MoD), y afirman a que este gasto ha aumentado en más de un 30% en los últimos dos años. Cada uno de estos gorros tiene un coste de 2.040 libras, unos 2.415,23 euros; e indican en que durante esta última década, la cantidad destinada al reemplazo de ellos ha supuesto más de un millón de libras.

Read more!

Desde PETA, solicitan al gobierno laborista que “deje de apoyar la cruel industria canadiense de la caza de osos” y han intentado impugnar ante los tribunales el uso de la piel, aunque no han tenido éxito. Y es que, la decisión sobre el reemplazo de su material recae en el Ministerio de Defensa y no los miembros de la Casa Real Británica. Aun así, en mayo de este año, la BBC reveló que la Familia Real está implementando nuevas medidas ecológicas como que la reina Camila ha dejado de comprar “ropa de piel nueva”.

Ana de Gran Bretaña, la Princesa Real y la Guardia del Rey asisten al desfile Trooping the Color que honra al rey Carlos en su cumpleaños oficial en Londres, Gran Bretaña, el 15 de junio de 2024. REUTERS/Chris J. Ratcliffe

¿Qué opciones hay para su modificación?

El propio Ministerio de Defensa declaró a la BBC que estaban “dispuestos a estudiar soluciones alternativas”, solo que actualmente “no existía ninguna opción satisfactoria”. Sin embargo, no es la primera vez que empresas ofrecen alternativas bastante aceptables para la sociedad. El peletero ecológico ECOPEL ofreció la posibilidad de crear piel sintética de lujo para las gorras de forma gratuita durante 10 años; y además, aseguraron que sería más barata que la de oso.

Quién es quién en la casa real británica: del rey Carlos, el más tardío de la historia, al polémico príncipe Andrés.

Esta oferta fue ofrecida hace ocho años y finalmente el Ministerio la ha denegado. Desde entonces, se han sacrificado más de 500 osos canadienses para la fabricación de estos sombreros. Algo que no solo ha provocado un gran dolor a los animalistas, sino también a las arcas públicas, ya que este aumento de precio viene provocada por modificaciones en las “disposiciones contractuales” relativas a la venta de los sombreros.

Frente a los activistas, los partidarios de este gorro defienden que su tipo de piel es mucho más duradera y estéticamente más bonita. Además, representa una tradición que lleva incorporada desde el siglo XVIII, cuando los guardias ganaderos de varios países europeos empezaron a crear sombreros con esta altura pero hechos con materiales como tela, cuero o metal. Hoy en día, los bearskins son uno de los aspectos más famosos de la Guardia del Rey de Reino Unido. Estos miden más de 45 centímetros de altura y suelen pesar casi un kilogramo, lo cual supone un gran entrenamiento durante la formación militar a la que se someten los soldados y caballeros de las residencias reales.

<br/>

Read more!