Vuelven los conciertos al Bernabéu… con estos límites

Este fin de semana, el estadio Santiago Bernabéu retomará su programación musical con dos conciertos de Romeo Santos y su grupo Aventura. Estas actuaciones marcan la reactivación de los eventos musicales en el recinto tras la pausa desde julio, cuando la cantante colombiana Karol G se subió al escenario de la casa del Real Madrid durante cuatro noches seguidas el pasado 20 de julio.

La celebración de estos conciertos ha venido acompañada de una serie de medidas que el Ayuntamiento de Madrid y el Real Madrid han implementado para reducir las molestias a los vecinos de la zona de Chamartín.

Tras el último concierto de la cantante de Medellín el pasado 23 de julio, el gobierno de la capital que rige José Luis Martínez-Almeida, anunció una serie de propuestas: limitar a las 23 horas los conciertos, restringir los horarios de los ensayos y reforzar la limpieza en la zona.

Tras la vuelta del verano, tanto desde el Ayuntamiento, dirigido por José Luis Martínez-Almeida, como desde la dirección del club, se ha establecido que los conciertos deberán finalizar a las 23:00 horas como máximo. Además, se ha impuesto un estricto control del volumen durante las actuaciones, con el objetivo de mantener los niveles de sonido dentro de los parámetros permitidos por la ley. Durante los últimos meses, las múltiples quejas han llegado debido al ruido y las aglomeraciones. Los macroconciertos que se celebran en el estadio no cumplían con la normativa contra el ruido de Madrid y hay ocasiones que se han llegado a superar los 85 decibelios cuando la ordenanza que lo regula, de acuerdo con la Ley del Ruido, establece como límite máximo los 53 decibelios en horario nocturno para espectáculos y los 63 durante el día.

En conciertos anteriores, la Policía Municipal había registrado mediciones de ruido por encima de los límites legales, lo que generó una serie de quejas vecinales. Para abordar esta situación, el Real Madrid anunció que está llevando a cabo un paquete de mejoras técnicas que se implementará a lo largo del año. Mientras tanto, las limitaciones en el horario y la potencia de los altavoces buscan reducir la contaminación acústica.

Entre las acciones que se pondrán en marcha, también se encuentra el refuerzo del servicio de limpieza en la zona. El Servicio Especial de Limpieza Urgente (SELUR) incrementará su presencia tanto antes como después de los eventos, con el objetivo de garantizar que los alrededores del estadio permanezcan en buen estado. Además, se instalarán más contenedores para mejorar la recogida de residuos generados por los asistentes a los conciertos.

En cuanto a la movilidad, se han adoptado medidas para facilitar el estacionamiento a los residentes de la zona durante los conciertos. Una de las principales acciones será la conversión de las plazas de aparcamiento azules en la calle Rafael Salgado en plazas verdes, lo que dará prioridad a los vecinos sobre los asistentes a los eventos. También se habilitarán más plazas de aparcamiento para residentes en el ‘hub’ de Castellana, una de las áreas clave de acceso al estadio.

* Con información de Europa Press