Un joven quedó tetrapléjico por un placaje de uno de sus amigos en una reunión ilegal durante la pandemia: “Lo que pasó es el terror de cualquier padre”

“Quiero disculparme con Anthony y su familia. No fue mi intención hacerlo en absoluto”. Con estas palabras, Théo J, un joven francés de 20 años comienza el juicio en el que se le acusa de haber dejado tetrapléjico a su amigo en una trágica noche de borrachera. Frente al tribunal penal de Besançon, intentó explicar este miércoles qué ocurrió en aquella velada para que el juez averigüe si Théo era consciente de la gravedad de los hechos en el momento en el que ocurrieron, cuál debe ser su pena y qué recompensa económica debe pagar al que era su amigo. Para comprender que ocurrió hay que remontarse a 2020, justo dos semanas después del fin del confinamiento por la pandemia. Pese a la prohibición de reuniones, un grupo de quince jóvenes se juntó en Malpas, en Haut-Doubs, para dar una fiesta. Y había mucho alcohol.

Alrededor de la 1:30 de la madrugada, con la noche ya avanzada y la bebida en la sangre, Anthony propone un juego: una especie de combate de lucha libre en el jardín, según relata FranceInfo. El objetivo era inmovilizar al contrincante y que cayera al suelo. Un juego que fue un error y que conllevó dramáticas consecuencias. Anthony y Théo compitieron entre ellos y hubo varios asaltos. Y uno de ellos fue el definitivo: Théo consiguió vencer a Anthony con una entrada que lo hizo aterrizar en una mala posición y que provocó una fractura de sus vértebras C4 y C5. Una lesión que le provocará cuadriplejía, la inmovilidad total en piernas y brazos.

Pero en un momento festivo nadie se dio cuenta de lo que había ocurrido realmente. Según relató Anthony, dejó de sentir sus piernas y perdió el conocimiento. Lo más fácil era pensar que era debido al alcohol, por lo que sus compañeros lo trasladan a una habitación y no le dan más importancia. No llamaron a los servicios de emergencia hasta mucho más tarde. “Yo no era para nada consciente de la situación, me dije que se iba a dormir y que al día siguiente las cosas estarían mejor”, afirmó Théo.

Aunque en ningún momento se ha puesto en duda que nada de lo que ocurrió aquella noche fue con la intención de hacer daño, para el tribunal es importante analizar los acontecimientos que dejaron a Anthony en una silla de ruedas, es decir, cómo fue en verdad ese combate. Según el peritaje médico, Anthony no podría haberse roto las vértebras simplemente al caer desde su altura, por lo que valora la posibilidad de que Théo hubiera podido realizar una entrada llamada “catedral” que consiste en agarrar a una persona, levantarla y lanzarla de cabeza hacia el suelo.

El joven lo negó. “Jugué ocho años de rugby, sé lo que es una entrada ‘catedral’, sé que es peligrosa, sé que no hice eso”, insistió. Pero la defensa de Anthony lo puso en duda. “En mi opinión -apuntó el abogado Julé-Parrade- se dio cuenta de que después de esta caída había sucedido algo inusual. La queja que podríamos presentarle es que no dijo las cosas inmediatamente”. “Lo que sucedió esa noche aterrorizó a todos los padres”, añadió.

La otra gran cuestión de la que, sobre todo Anthony y su familia, están pendientes, es la compensación económica. “Me alegro de que las cosas estén progresando, porque cuatro años han sido muchísimos años sin que supiéramos nada. Tuvimos que adelantar todos los gastos, tal vez finalmente consigamos una compensación”, apuntó Anthony al citado medio francés. En este sentido, Théo pidió que se tuviera en cuenta la participación de Anthony en la pelea y su papel, por lo que su compañía de seguros pide cubrir únicamente el 50% de la indemnización.

Anthony no pretende que la pena para Théo sea la cárcel. “No quiero necesariamente que reciba una pena de prisión suspendida, sólo que el tribunal reconozca su culpabilidad”, explicó Anthony, que cuatro años después de la tragedia trata de seguir adelante y continuar con su vida.

Tras el juicio, la fiscal fue clara: “En este caso, hay una palabra que será importante: es la palabra arrepentimiento. Lamento que Anthony propusiera este estúpido juego. Lamento por parte de Théo por haber jugado a este juego que tendrá consecuencias dramáticas”, declaró. “Pero no basta con arrepentirse y es necesaria una sanción”, añadió. Así, solicitó al tribunal un año de prisión contra Théo J. La decisión del tribunal se dictará el próximo 16 de octubre.