Una de las bodas más esperadas de este año se ha llevado a cabo el pasado fin de semana. El sábado 31 de agosto, Marta Luisa de Noruega y Durek Verrett unieron sus vidas en matrimonio en una majestuosa boda que tuvo cuatro días de celebración. Era la segunda vez que la princesa pasaba por el altar, pues su primera boda fue con Ari Behn, con quien estuvo casada entre 2002 y 2017 y formó una familia con la llegada de sus tres hijas, Maud Angélica, Leah Isadora y Emma Tallulah.
Tras su separación, la hija de Harald y Sonia conoció a Durek Verrett, con quien inició una historia de amor que, desde el principio de su andadura, ha estado marcada por la polémica debido al cuestionable pasado del estadounidense, lo que generaba una gran desconfianza sobre dicha unión. Las críticas y los comentarios tampoco tuvieron tregua en su gran día. Y es que, lejos de abrir las puertas a la ciudadanía y a los medios, como se ha hecho tradicionalmente en cada boda real noruega, la royal noruega y su ya marido optaron por vender su enlace a la revista internacional Hello! y ¡Hola!
El hecho de que la pareja haya vendido su boda a una publicación generó una gran desazón en el seno de la familia real, quienes no estaban de acuerdo con su decisión. Era tal el escándalo que se generó que, incluso, se dudaba que los miembros de la casa real noruega iban a asistir al matrimonio. Finalmente, optaron por no perderse este importante paso en la vida de Marta Luisa.
Los reyes Harald y Sonia, los príncipes herederos, Haakon y Mette-Marit, y sus hijos acudieron a la preboda y a la ceremonia. Eso sí, al contrario que los novios, ellos se negaron a posar en exclusiva para la ya citada publicación. Las imágenes que trascendieron mostraron que las mujeres han lucido los trajes típicos de la región, mientras que el monarca, y el príncipe Haakon iban en traje, en negro y azul, respectivamente.
La tajante decisión de Harald
No han pasado ni siete días desde que se produjo el enlace y el rey Harald V de Noruega ha tomado una tajante e inesperada decisión que afecta en gran medida a la princesa Marta Luisa. El monarca noruego ha dejado claro quién forma parte de la casa real y quién no y, para ello, ha realizado un importante cambio en la página web de la corona, según Lecturas.
Al igual que en otras monarquías europeas, se considera parte de la familia real a todos los familiares directos del rey, como es el caso del príncipe heredero, las princesas y las infantas. El resto de familiares, como serían las hermanas o los nietos no frutos del heredero, serían denominados ‘Familia del Rey’. De esta manera, el segundo hijo de los príncipes herederos, Sverre Magnus, la princesa Astrid, hermana del monarca, o Marta Luisa se encontraban dentro de esta segunda categoría y podían asumir compromisos oficiales o no. Esta categoría también abarca los perfiles de las hijas de la princesa Marta Luisa.
Sin embargo, tras la segunda boda de la royal noruega, este campo ha sido modificado. En lugar de añadir nuevos perfiles tras la incorporación de Durek Verrett como miembro de la casa real noruega tras contraer matrimonio con la hija de los reyes, algunos de ellos han sido retirados, como se puede ver en la página web oficial de la corona noruega. “La Casa Real de Noruega pertenece a la Casa de Glücksburg. Los miembros de la Casa Real Noruega son Sus Majestades el Rey Harald y la Reina Sonia y Sus Altezas Reales el Príncipe Heredero Haakon, la Princesa Heredera Mette-Marit y la Princesa Ingrid Alexandra”, indica el texto presentación en el que se añade una pequeña biografía de cada uno de ellos, junto con su imagen oficial.
Posteriormente, se ha añadido una nueva categoría. “Además de los miembros de la Casa Real, Su Alteza Real el Príncipe Sverre Magnus, Su Alteza Real la Princesa Marta Luisa y Su Alteza Real la Princesa Astrid también ostentan títulos reales”, se puede leer en la página web, dejando claro quién sí y quien no pertenece a monarquía noruega. Las modificaciones han dejado fuera los nombres del esposo de la princesa Marta Luisa, así como sus hijas. Tampoco está Marius Borg, el hijo mayor de Mette-Marit, quien hasta hace unos días contaba con su propia ficha.