Bloquean una carretera con hormigón para evitar la llegada de 900 caravanas a un evento en un aeródromo

Este martes 3 de septiembre, a primeras horas de la mañana, camiones cargados con bloques de hormigón y piedras llegaron a la principal vía de acceso al aeródromo de Bourg-en-Bresse, Ain, de la región de Auvernia-Ródano-Alpes, en Francia. El objetivo era claro: impedir la instalación de alrededor de 900 caravanas que formarán parte de una reunión anual evangélica regional de viajeros. Empresarios locales, preocupados por el impacto que este evento tendrá en sus operaciones, organizaron el bloqueo como forma de protesta, según ha relatado el medio francés France 3 Régions.

Desde hace semanas, y como ha explicado el citado medio, las empresas que operan en el aeródromo han expresado su malestar ante la decisión de la prefectura de Ain (ciudad capital de un departamento) de autorizar este evento. Las pistas del aeródromo, conocido como Terre des hommes, estarán cerradas al tráfico aéreo desde el martes 3 hasta el próximo lunes 16 de septiembre, lo que afectará considerablemente a las operaciones de las compañías locales que dependen de la pista para sus actividades.

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Uno de los principales afectados es el grupo Aerolight, que emplea a diez personas y utiliza la pista para reparar aviones. Jean-Baptiste Bely, su director, estima que las pérdidas de su empresa podrían ascender a 100.000 euros debido al cierre temporal. En una entrevista recogida por France 3 Régions, Bely confesó estar “al límite de sus fuerzas” por la incertidumbre que rodea la situación.

En total, se espera que unas 4.000 personas, 900 caravanas y 1.500 vehículos lleguen al aeródromo para participar en este encuentro evangélico. El lugar fue requisado por la prefectura como parte de su plan para albergar el evento, aunque los organizadores han argumentado que existían otros sitios posibles para la celebración.

Las empresas que trabajan en el aeródromo, que emplean a un total de 18 personas, se movilizaron la mañana del martes para expresar su descontento. Según informaron, han conseguido asegurar una reunión con la prefectura para discutir una posible compensación económica por las pérdidas derivadas de la ocupación del aeródromo. En total, se estima que el coste de la ocupación podría rondar los 400.000 euros.

Ante el temor de que las protestas de los empresarios escalaran, la prefectura emitió un decreto que prohíbe cualquier tipo de manifestación o bloqueo en las inmediaciones del aeródromo. Las autoridades locales también temen que las familias nómadas puedan optar por asentarse en terrenos no preparados para este tipo de eventos si se les impide el acceso al aeródromo.

A pesar de la prohibición, el bloqueo llevado a cabo este martes se desarrolló de manera pacífica. Los manifestantes utilizaron troncos y bloques de hormigón para obstaculizar la carretera principal que conduce al aeródromo. Sin embargo, hacia media mañana, el bloqueo fue levantado y la situación comenzó a normalizarse.

Los empresarios locales siguen preocupados por el impacto que el evento tendrá en sus operaciones. Aunque han conseguido abrir un canal de diálogo con la prefectura para discutir posibles compensaciones, el malestar persiste. El futuro de sus actividades, en gran medida, depende de las decisiones que tome la administración local en los próximos días.