La madrugada de este jueves, se ha dado ha conocer la sentencia del chef Daniel Sancho por el asesinato de Edwin Arrieta. El español ha sido condenado a cadena perpetua por la Corte Provincial de Koh Samui, que le ha atribuido los delitos de descuartizamiento y la ocultación del cadáver del cirujano, así como por la desaparición del pasaporte de la víctima. La Justicia ha considerado que hubo premeditación en el crimen y ha impuesto una de las penas más graves al cocinero español por este agravante.
El tribunal de Koh Samui ha rebajado la condena de pena de muerte, que le habrían interpuesto en un principio, a cadena perpetua. El fallo también impone a Sancho una indemnización de cerca 130.000 dólares para los padres de Edwin Arrieta por los perjuicios que les ha provocado. En este sentido, cabe recordar que la familia del colombiano, de fuertes creencias católicas, no apoyaba la imposición de una condena a pena de muerte. No obstante, el equipo jurídico de los familiares de la víctima pedía una indemnización de unos 760.000 euros por el “daño económico” que, según sus cálculos, le provocó el crimen del cirujano
Por qué le han rebajado la condena
La rebaja de condena que a aplicado el tribunal de Koh Samui a la hora de redactar la sentencia responde a que el acusado aportó evidencias que han ayudado a la resolución del caso y dijo que “sentía lo ocurrido” al término del juicio. Al escuchar el dictamen este jueves, Sancho se ha mostrado compungido y se le ha visto con lágrimas en los ojos, según fuentes presentes en la lectura de la sentencia. Por ahora, el español continuará encarcelado en la misma prisión de Koh Samui en la que permanece desde hace casi 400 días. Será así, al menos, hasta que la sentencia sea firme una vez la instancia superior se pronuncie sobre el recurso que interponga la defensa del cocinero español.
Una condena que agrada a la familia
Juan Gonzalo Ospina, el abogado que ha liderado el equipo jurídico de la familia Arrieta, ha mostrado entusiasmo tras conocer la sentencia de Sancho. En una conversación con Infobae España tras la lectura del fallo, el letrado ha declarado que “la pena de muerte hubiera sido un caramelo envenenado” para el entorno de la víctima, ya que desde un principio los familiares de Edwin Arrieta, de fuertes creencias católicas, no eran partidarios de la pena capital.
El abogado se felicita porque “han prevalecido las tesis” que venían defendiendo junto a la Fiscalía a lo largo del procedimiento, especialmente durante las sesiones del juicio oral. El tribunal ha acabado considerando probada la premeditación en el asesinato de Arrieta, por lo que solo cabían dos escenarios posibles: pena de muerte o cadena perpetua. Por el momento, Ospina se muestra “satisfecho” con la cuantía estipulada por el tribunal, aunque el equipo jurídico “estudiará” si recurrirla. No obstante, la defensa de Daniel Sancho ya ha confirmado que recurrirá el fallo, para lo que cuenta con un plazo máximo de un mes.