Despedida en directo por Javier Sardá, enemiga de Meloni y votante de Vox: así es Aída Nízar, el polémico fichaje de ‘Ni que fuéramos Shhh’

Ni que fuéramos Shhh regresa el próximo lunes 2 de septiembre y ha anunciado la incorporación de una polémica colaboradora. Aída Nízar vuelve a la televisión para sumarse al plantel de tertulianos del formato de Fabricantes Studio emitido en streaming y en el canal TEN.

Entre los compañeros con los que va a compartir un plató a estrenar, la exconcursante de Gran Hermano tiene varios enemigos, como es el caso de la presentadora, María Patiño, o de Belén Esteban, con quien en su día protagonizó sonados enfrentamientos televisivos.

Pero Aída no solo ha tenido conflicto con los rostros conocidos de Sálvame. También ha sido enemiga pública del programa y de su productora, La Fábrica de la Tele, extinta tras la ruptura entre sus fundadores y Mediaset España. Nízar ha demandado en varias ocasiones a los responsables de la compañía y se ha personado como acusación particular en la ‘Operación Deluxe’, la trama de presunta revelación de secretos y cohecho en la que ella aparece entre la amplia lista de víctimas.

Sin embargo, Aída y la empresa comandada por Óscar Cornejo y Adrián Madrid parecen dispuestas a olvidar sus rencillas y abrir una nueva etapa de colaboración profesional con la que la concursante de Gran Hermano 5 regresa a la televisión, un medio en el que ha protagonizado sonadas polémicas.

Corría el año 2004 y una magnética Aída Nízar hacía méritos para convertirse en estrella de la televisión. Tras salir de la casa de Guadalix de la Sierra, la hija de Mari Ángeles Delgado buscaba su hueco en los platós y Javier Sardá, experto en catapultar a ex ‘grandes hermanos’, la fichó para Crónicas Marcianas.

Pero el paso de Aída por el exitoso late show duró menos de lo previsto y se cortó de manera fulminante tras un inaceptable gesto por parte de la colaboradora. Y es que Nízar no dudó en subir a la grada, sentarse en las piernas de una persona con discapacidad física y pronunciar la frase “Dios da a cada uno lo que se merece”.

Sardá instó a la tertuliana a retirar de inmediato esas palabras, pero ante sus excusas, el presentador terminó expulsándola del plató. “Perdona, Aída, pero si en ocasiones he dicho en público que Bush era un hijo de puta, ahora tengo que decir que, Aída, eres una hija de puta”, exclamó antes de pedirle que abandonase el programa.

Aquella ocasión no sería la única en que Aída recibiera el malsonante calificativo en televisión. Años más tarde, sería Jorge Javier Vázquez quien se lo dedicara después de que la entonces concursante de Supervivientes 2011 protagonizase una polémica escena con Rosa Benito.

Nízar había sido la primera expulsada del reality, pero el programa la invitó a volver a Honduras en la semana 10. Su regreso coincidió con el accidente en el que José Ortega Cano, conduciendo bajo los efectos del alcohol, acabó con la vida de Carlos Parra. Aprovechando esa información y la presencia de la cuñada del torero en la isla, Aída le dijo cosas como “imagínate que le pasa algo a Ortega Cano” o “¿sabes si está siguiendo tu concurso?”.

Tras ver las imágenes en plató, Jorge Javier se acercó a la madre de Aída y le espetó: “Si yo estuviera en la calle, la hubiera llamado hija de puta”. No obstante, la controvertida concursante pudo continuar en el programa y no recibió ningún castigo.

En el año 2010, Aída se enfrentó a la entonces exministra de Juventud Giorgia Meloni, actual primera ministra de Italia. La española, que residía en la república mediterránea tras su paso por la versión italiana de Gran Hermano, había copado titulares por bañarse en la Fontana de Trevi y en la Fuente de los Cuatro Ríos de Roma.

“Para esta ignorante propongo un año de trabajos en beneficio de la comunidad limpiando las calles de Roma. Así tal vez empiece a tener respeto por nuestra capital”, escribió Meloni en sus redes sociales, por lo que el programa de Canale 5 Live - Non è la d’Urso organizó un cara a cara entre ellas.

“Berlusconi se equivocó contigo. Escupes en el plato donde comes, te interesas mucho por mí”, le espetó Aída, que la invitó a dejar la política. Meloni, por su parte, aseveró que no iba al programa para “hacer el payaso” e invitó a la vallisoletana a irse a bañarse “en las fuentes españolas”.

En las pasadas elecciones generales, Aída volvió a convertirse en protagonista tras mostrar su apoyo a Santiago Abascal. Con una imagen en la que aparecía ella con la papeleta de Vox y una imagen del líder de la formación de ultraderecha, la televisiva escribía: “Confiamos en ti. ¡Ojalá seas el Nayib Bukele español! ¡Devuélvenos la España que merecemos y que han destruido!”.

Posteriormente, explicó su decisión de votar a la extrema derecha y negó que Abascal fuera homófobo y xenófobo. “Mi padre vino a estudiar a España y se convirtió en catedrático; ésa es la diferencia. Ahora la inmigración viene a delinquir. Ojalá tenga la fuerza suficiente para gobernar o al menos poner orden”, dijo a El Español.