Pedro Cavadas, uno de los cirujanos más destacados y reconocidos de España, ha generado polémica con sus declaraciones en una reciente entrevista concedida al diario El Mundo. Conocido por ser el artífice de intervenciones quirúrgicas complejas, como el primer trasplante de cara realizado en España hace ya 15 años, Cavadas es también célebre por su estilo directo y opiniones contundentes.
Durante la entrevista, el médico fue interrogado por la periodista Ana del Barrio sobre su práctica quirúrgica y si la realiza acompañado de otros cirujanos. El médico explicó que opera “con ayudantes cambiantes”, señalando que “hay muy poca gente que quiera trabajar de verdad”. Al respecto, Cavadas no ocultó su preocupación por lo que percibe como una pérdida de la cultura del trabajo en las nuevas generaciones de médicos.
“El 90% o 100% de los jóvenes, antes de terminar la especialidad, está pensando en dedicarse a la cirugía cosmética”, afirmó. Según el cirujano, esta especialidad es más sencilla y atractiva económicamente, en contraste con la cirugía reconstructiva, que considera más desafiante pero menos lucrativa.
El médico también manifestó su sorpresa ante la actitud de los jóvenes que buscan comodidad en lugar de afrontar desafíos profesionales. “La cirugía cosmética es muy sencilla y llama la atención que toda la ambición profesional de gente de veintipico años sea coger vacaciones y dedicarse a algo sencillo y sin problemas”, comentó. Para él, es incomprensible que alguien priorice la comodidad en una etapa de la vida donde debería primar el aprendizaje y el trabajo arduo.
Defensa de Amancio Ortega
Otro de los temas que abordó Cavadas en la entrevista con El Mundo fue la figura de Amancio Ortega, el fundador de Inditex, y la controversia en torno a sus donaciones de material médico al sistema de salud pública. Al ser cuestionado sobre si aceptaría donaciones del empresario, Cavadas fue tajante en su defensa de Ortega.
“No le conozco, pero me parece una persona injustísimamente cuestionada por gente que no tiene ninguna autoridad para hablar”, declaró el cirujano. Para Cavadas, criticar a Ortega por sus donaciones es una muestra de ignorancia. “En general, las empresas grandes empiezan sin subvenciones trabajando 23 horas al día durante ocho días a la semana. Criticarle por donar máquinas es un rebuzno de un calibre monumental. Y que me perdonen los burros porque les tengo mucho respeto”, añadió.
Cavadas también aprovechó para expresar su descontento con el estado de la cooperación internacional, un ámbito en el que ha participado activamente realizando cirugías en países en desarrollo. Cavadas no dudó en calificar la cooperación humanitaria como un sector “prostituido y maltratado”, afirmando que en muchos casos se utiliza como “lavadero de conciencias”.
Para Cavadas, la ayuda internacional a menudo se desvía de las verdaderas necesidades de las personas en los países en desarrollo. Según el cirujano, lo que realmente preocupa a las personas en esos lugares es sobrevivir, tener suficiente comida y acceso a atención médica básica, y no iniciativas que considera superficiales.
En este sentido, el médico fue particularmente crítico con la campaña “Un juguete, una ilusión”, que lleva 25 años distribuyendo juguetes a niños en países en desarrollo. “Con todo mi respeto, si hay algo que no necesitan los niños en ninguna parte del mundo son juguetes. Porque hay juguetes universales. Allá donde vayas, todos los niños llevan una rueda con un palo o se hacen un balón y juegan al fútbol”, afirmó.