Italia inmoviliza durante dos meses el barco de rescate de Médicos Sin Fronteras: “Nos sancionan por salvar vidas”

Las autoridades italianas han bloqueado durante 60 días el barco de Médicos Sin Fronteras (MSF), Geo Barents, tras haber rescatado a 191 migrantes, según ha denunciado la ONG.

Italia, que emitió la orden de detención este lunes a raíz de varias operaciones de rescate que tuvieron lugar la madrugada del 23 de agosto en el Mediterráneo central, alega que el Geo Barents no proporcionó información oportuna al Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo italiano (MRCC) y puso en peligro la vida de personas. Sin embargo, la organización rechaza estas acusaciones, pues “se basan únicamente en información facilitada por la Guardia Costera libia”, aclaran.

“Naciones Unidas ha documentado y acusado a la Guardia Costera libia, a la que brinda apoyo la UE y a la que las autoridades italianas consideran un actor fiable, de complicidad en graves violaciones de los derechos humanos en Libia constitutivas de crímenes contra la humanidad, de connivencia con traficantes y de ser responsable de violentas devoluciones en el mar”, denuncia Juan Matías Gil, representante de búsqueda y rescate de Médicos Sin Fronteras. “Nos han sancionado simplemente por cumplir con nuestro deber legal de salvar vidas”.

El 23 de agosto, los equipos de MSF en el Geo Barents llevaron a cabo cinco operaciones de rescate. La tercera, de la que se atribuye a la organización de no haber informado a tiempo, se produjo después de que el equipo del Geo Barents presenciara cómo un número considerable de personas caía por la borda en las inmediaciones del barco. “Fue en plena noche; vimos a gente saltando de un barco de fibra de vidrio, cayendo o siendo empujada al agua. Nuestros equipos no tenían más opción que acudir, estabilizar a las personas y sacarlas del agua lo antes posible”, explica por su parte Riccardo Gatti, jefe del equipo de búsqueda y rescate, que asegura que existía “un peligro inminente de que la gente se ahogara o se perdiera en la oscuridad de la noche”.

Si bien se trata de la tercera vez que el Geo Barents es inmovilizado, esta es la detención más prolongada. Hasta la fecha también es la vigésimo tercera ocasión en la que un buque de rescate humanitario ha sido detenido desde la entrada en vigor del decreto-ley italiano a principios de 2023, conocido como Decreto Piantedosi, una norma que según denuncia MSF, “está específicamente diseñada para impedir las vitales actividades de búsqueda y rescate de las organizaciones no gubernamentales en el mar”.

“Este es un ejemplo más de hasta qué punto el Decreto Piantedosi no sólo contraviene las leyes internacionales y europeas, sino que también contradice las obligaciones de actuar ante un estado de necesidad cuando hay vidas humanas en peligro”, sostiene Gil. “Las autoridades nos obligan a priorizar entre salvar personas en el mar o la libertad del buque de salvamento”, añade. El activista asegura que la organización impugnará esta detención por los cauces legales oportunos.

Desde MSf recuerdan que la paralización del barco “agravará aún más la ya insuficiente capacidad de búsqueda y rescate en el mar”, haciendo que el Mediterráneo central, una de las rutas migratorias más peligrosas del mundo, “sea aún más mortífero”. Por ello, la organización insta a las autoridades italianas a liberar al Geo Barents, al tiempo que demanda a la UE y a sus Estados miembros que suspendan todo apoyo material y financiero a la Guardia Costera libia y a las autoridades con un historial de violaciones de derechos humanos.