Así es la cárcel de Tailandia en la que ha estado Daniel Sancho: masificada y con elevadas temperaturas

Estas son las duras condiciones de la prisión donde ha estado retenido el chef español a espera de la resolución de su sentencia

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Imagen de archivo de la prisión de la isla tailandesa de Samui . (EFE/EPA/SITTHIPONG CHAROENJAI)
Imagen de archivo de la prisión de la isla tailandesa de Samui . (EFE/EPA/SITTHIPONG CHAROENJAI)

Después de alrededor de un año de espera para conocer la sentencia del crimen cometido por Daniel Sancho el pasado agosto de 2023, mañana se pone punto y final a la historia. Tras los numerosos giros de guion que ha ido teniendo el caso, en el que el hijo del actor Rodolfo Sancho acababa con la vida del cirujano colombiano Edwin Arrieta, finalmente se publicará este jueves la resolución sobre la pena que deberá acatar el español.

Este asesinato fue llevado a cabo en Tailandia, donde Sancho ha permanecido desde entonces ante la incapacidad de volver a España antes de ser detenido. Por ello, fue trasladado a la cárcel provincial de Koh Samui, donde ha estado cumpliendo su condena durante más de 240 días. Asimismo, las condiciones de vida de cualquier cárcel no son plato de buen gusto para nadie, sin embargo, esta prisión tailandesa se caracteriza por sus duras circunstancias.

¿Qué condiciones tiene la prisión de Daniel Sancho?

El centro penitenciario de Koh Samui se encuentra en la aislada isla paradisiaca que lleva su mismo nombre. No obstante, su cárcel tiene bastante que envidiar en este sentido. En ella, las temperaturas son realmente elevadas, hasta el punto de que los presos van sin camiseta para intentar despejar el calor en un país donde no suele haber menos de 20 °C, independientemente de la época del año.

De hecho, el experto en cuestiones penitenciarias, Javier Casado, transmitió en Equipo de Investigación, el pasado diciembre, que “la sensación es de que estás cumpliendo condena en una sauna”. Esto, además, se ve incrementado por la gran masificación de la prisión, que llega incluso a duplicar su capacidad. “En celdas de 20 o 25 personas, hay más de 40″, afirmaba el también director de la fundación +34. Se trata de un factor que no solo afecta por las temperaturas, sino a cuestiones como el reposo o el reparto de suministros.

Finalmente, también cabe destacar que Tailandia es un territorio ciertamente xenófobo en algunos aspectos. Por esta razón, en caso de no adaptarte del todo al idioma en la cárcel, pueden llegar a reaccionar con violencia.

Imagen de Daniel Sancho en un furgón para ser trasladado a los tribunales (EFE/EPA/Sitthipong Charoenjai)
Imagen de Daniel Sancho en un furgón para ser trasladado a los tribunales (EFE/EPA/Sitthipong Charoenjai)

¿Cuál es el día a día de Sancho en Koh Samui?

Dentro de la dureza a la que puede llegar la cárcel de Samui, Daniel Sancho se encuentra en el módulo hospitalario donde se aloja a aquellos que tienen algún tipo de problema mental o de salud. En este recinto, las condiciones son algo más flexibles. Sin embargo, esto no le impide compartir celda con otras 50 personas, entre los que se halla otro español.

Su día comienza a las 6:20 cuando es despertado con los silbatos de los guardias. Tras media hora, se les permite acudir todos juntos a un baño donde apenas hay dos piletas y 16 duchas para lavarse. Una vez vuelven a las celdas, y después del protocolario himno de Tailandia, se visten y van a desayunar. Respecto a la comida, no resulta muy apetecible, y es que antiguos presos la definen como un “arroz desagradable y caldo maloliente”.

Durante el resto de la jornada, Sancho ha asegurado que goza de mucho tiempo para hacer yoga, practicar Muay Thai, escribir libros sobre sus vivencias y leer durante largos ratos. “Estoy leyendo mucho. Llevaba años sin leer. Desde que me leí Juego de Tronos”, así como le confirmó a EFE. Por otro lado, no tiene acceso a internet, y el único contacto que posee con cualquier tipo de contenido audiovisual es una televisión ubicada en una de las zonas comunes.

Asimismo, también tiene opción de hacer deporte, acudir a un gimnasio de lo más precario o recibir las visitas de sus conocidos en una sala donde el cristal y la línea telefónica les separa. Entre los más destacados se encuentra su padre Rodolfo Sancho o su abogado. Todo ello no más allá de las 16:00, donde son recontados y devueltos a sus calabozos, en donde no hay ninguna cama y el agua es escasa.

Una de las visitas de Rodolfo Sancho a su hijo en el centro penitenciario de Koh Samui (EFE/EPA/Shittipong Charoenjai/Archivo)
Una de las visitas de Rodolfo Sancho a su hijo en el centro penitenciario de Koh Samui (EFE/EPA/Shittipong Charoenjai/Archivo)
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