Un fondo buitre embargará un pueblo de Sevilla si no le paga una deuda con la que se embolsará 20 millones de euros limpios

El Ayuntamiento Burguillos, un pueblo sevillano de 6.600 habitantes, ha pagado al fondo buitre estadounidense KSAC Europe Investments 2,5 millones de euros, de los 27 millones que le debe, para evitar que cumpla su amenaza y embargue las cuentas, las tierras y los inmuebles municipales si no le abona el total de la deuda, según ha informado su alcalde Domingo Delgado, del Partido Popular.

Con este primer pago, el Ayuntamiento ha evitado el embargo inicial mientras negocia el pago del resto de la deuda. Así, cumple parte de la sentencia de un juzgado de lo Mercantil de Sevilla que condenó al municipio sevillano a pagar al fondo buitre 27 millones de euros por una deuda que el pueblo arrastra desde 2007 y que se contrajo durante el gobierno del anterior alcalde, el socialista José Juan López.

La deuda rondaba al principio los 13,5 millones de euros, correspondientes a impagos generados por la sociedad municipal Burguillos Natural, que fue aumentando con los distintos gobiernos municipales al multiplicarse los intereses hasta alcanzar los 27 millones de euros.

Los bancos, al ver que la sociedad municipal no pagaba su deuda, se la vendieron a la baja al fondo KSAC Europe Investments, que la compró por siete millones de euros y ahora pide 27 millones, con lo que pretende embolsarse una ganancia de 20 millones de euros, casi cuatro veces más de lo que pagó.

El Ayuntamiento, según su alcalde, le ofreció al fondo un millón de euros más de lo que pagó para comprarle de nuevo su deuda, pero rechazó la oferta al considerarla insuficiente.

Si no salda esa deuda, el fondo podría embargar todos los bienes tangibles o no tangibles del municipio a nombre del consistorio, por lo que podría afectar a saldos y activos bancarios, subvenciones de otras administraciones o locales que estén a nombre del Ayuntamiento.

Domingo Delgado ha señalado en un bando, difundido en la localidad y recogido por EFE, que los 2,5 millones de euros pagados al fondo de inversión iban a destinarse a “cuestiones muy necesarias para los burguilleros, concretamente a la construcción de un nuevo polideportivo al final de la calle Pepe Luna, un nuevo recinto ferial o un plan de empleo”, con el que se pretendía dar trabajo a todos los desempleados del municipio, así como al asfaltado de varias calles.

El edil ha tachado de “desaprensivos” a quienes cometieron la ilegalidad que ha terminado con este embargo, que miraron “por sus intereses personales y no por los intereses de los burguilleros”.

En los próximos días, el Ayuntamiento tendrá que poner a disposición de un juzgado todos los bienes patrimoniales del Ayuntamiento, como solares, casas o parcelas rústicas.