Mercadona rebaja el precio del aceite de oliva por debajo de siete euros el litro y aviva la guerra comercial: ¿cuánto cuesta en Lidl, Carrefour, Aldi y Alcampo?

El mercado del aceite de oliva comienza a experimentar cambios significativos por vez primera desde la rebaja del IVA. El llamado oro líquido comienza a dar muestras de recuperación, siendo Mercadona uno de los primeros supermercados en rebajar el precio de este codiciado producto. En concreto, Mercadona reduce desde este miércoles el precio de la botella de un litro de sus variedades Suave e Intenso por debajo de los siete euros. Estos dos productos comenzarán a costar 6,95 euros, rebajándose en 67 céntimos.

La cadena de supermercados que dirige Juan Roig aplicará a su vez la garrafa de tres litros, que pasará a costar 19,85 euros frente a los 22,76 euros a los que se vendía hasta ahora. El grupo de distribución explica que con esta última rebaja, ha reducido el precio del aceite de oliva un 25% en lo que va de año. Con esta rebaja, Mercadona se posiciona nuevamente con los precios más competitivos del mercado, en contraste con otras cadenas como Carrefour y El Corte Inglés, que mantienen tarifas significativamente más altas.

Según datos de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), Carrefour registra el precio medio más alto por litro, alcanzando los 11,33 euros. Le siguen El Corte Inglés, que abarca las cadenas Supercor e Hipercor (10,87 euros), Ahorramás (10,85 euros), Día (9,93 euros), Alcampo (9,89 euros), Más (8,48 euros) y finalmente Lidl con 8,39 euros. En cuanto a marcas blancas, Supercor tiene la opción menos económica con 9,15 euros por litro, seguida de Eroski y Día, que mantienen sus marcas en 8,95 euros por litro.

Facua-Consumidores en Acción ha lanzado una nueva web para monitorizar diariamente el precio del aceite de oliva en seis supermercados diferentes: Alcampo, Carrefour, Dia, Eroski, Hipercor y Mercadona. “Se trata de una herramienta con la que pretendemos empoderar a los consumidores. El objetivo es que todos podamos convertirnos en vigilantes del mercado y sepamos quién, cuánto y cuándo aplica subidas de precios en los alimentos”, señaló el secretario general de Facua, Rubén Sánchez.

El aceite de oliva fue el producto que más se encareció durante el año pasado. Los consumidores pagaron de media 5,52 euros por litro, casi un 42% más que en 2022. Un reciente informe del Ministerio de Agricultura indicaba que, debido al elevado precio de este producto, su consumo se desplomó en un 11%.

Con la rebaja del IVA en 2023, derivada de la crisis económica provocada por la pandemia, el BOE dejaba claro que “la reducción del tipo impositivo beneficiará íntegramente al consumidor”. Esto supone que los supermercados no podrán subir precios para incrementar sus márgenes de beneficio. Para asegurarse de que no hay aumento de precios, el Gobierno aplica una serie de medidas habituales: “La efectividad de esta medida se verificará mediante un sistema de seguimiento de la evolución de los precios, independientemente de las actuaciones que corresponda realizar a la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) en el ámbito de sus competencias”.

No obstante, experiencias pasadas con este tipo de medidas despiertan dudas. Con la crisis energética de 2022, el precio de la gasolina se disparó hasta cifras nunca antes vistas en España, lo que provocó la reducción de su tipo impositivo. La CNMC puso en marcha un “sistema de vigilancia mucho más intenso” para evitar que las gasolineras alteraran los precios y se aprovecharan de las bonificaciones. Cani Fernández, presidenta de la Comisión, explicaba que el regulador conoce “los precios de todas las gasolineras, todos los días”. Sin embargo, y pese a las denuncias de Facua, nunca se impuso ninguna multa a ninguna gasolinera.