Una nueva remontada de los precios de la vivienda y del alquiler se encontrarán los españoles a su regreso de las vacaciones. Subida que continuará en la recta final del año impulsada por la escasez de oferta inmuebles en venta y en renta y una creciente demanda que “no se desacelera”, sobre todo en las grandes ciudades, vaticinan los analistas.
Julio cerró con nuevos récords históricos en el precio de la vivienda tras un incremento del 7,9% interanual, hasta situar el coste del metro cuadrado en los 2.153 euros, según datos de idealista. El alquiler no se quedó atrás, remontó al cierre del mes pasado un 10,4% respecto al año anterior, alcanzando máximos y colocando el precio del metro cuadrado en renta en los 13,1 euros de media en el país.
Pero los precios no se quedarán ahí, irán a más debido al gran desequilibrio que existe entre la alta e intensa demanda y la limitada oferta de vivienda en venta y en alquiler. En el caso del precio de compra, los analistas dan porcentajes. Los de Bankinter calculan que el coste de la vivienda se encarecerá a lo largo de 2024 un 3%, y el año que viene lo hará un 2%, los mismos porcentajes que prevé el I Solvia Market View 2024.
Argumentan que esta subida estará soportada por un mercado laboral fuerte, la escasez de oferta en las principales ciudades, la subida del precio de los alquileres y el proceso de rebajas de tipos de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE).
Simone Colombelli, director de hipotecas del comparador y asesor hipotecario iAhorro, reconoce que “pese a que esperábamos que los precios bajarán, aunque fuera levemente, a lo largo de este año, no ha sido así y lo peor es que tampoco veremos cambios drásticos en este sentido a corto o medio plazo”.
Incide en que la elevada demanda de compra de vivienda que hay en España y la poca oferta de inmuebles a la venta hacen que “el mercado inmobiliario siga muy tensionado, sobre todo en las grandes ciudades, lo que dispara el precio de los inmuebles”.
El alquiler no toca techo
Si el precio de compra de los pisos pulveriza récords mes a mes, el del alquiler sigue su estela y también lo hace, reconoce Ferran Font, director de Estudios de pisos.com: “La racha al alza de los precios del alquiler parece no tener fin. Las rentas se han encarecido tanto en los últimos años que muchos hogares están al límite, atrapados en el pago de una mensualidad que les obliga a vivir al día y a posponer sus planes”.
Este encarecimiento de las rentas hace que “todo el que se plantea convertirse en inquilino y cuente con ingresos medios debe empezar por asumir renuncias, desde su zona de interés para alquilar hasta determinadas calidades”, recomienda Font.
Por su parte, María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, también advierte de que el mercado del alquiler continúa en máximos históricos y con récord de precios en la mayoría de las autonomías y en prácticamente todas las capitales de provincia.
Beneficiados y perjudicados
Estos movimientos del mercado inmobiliario tiene unos claros beneficiarios, los que compran inmuebles para ponerlos en alquiler, señala Colombelli, para los que esta es una inversión muy rentable. Los perjudicados también son evidentes, las familias que van más justas de presupuesto y que tienen cada vez más complicado ahorrar.
“Si destinan buena parte de su salario mensual al alquiler, su capacidad de ahorro para acceder a una vivienda en propiedad disminuye significativamente”, indica Colombelli. Ello ha hecho que el esfuerzo que tienen que llevar a cabo los ciudadanos para alquilar haya alcanzado el máximo recomendado por los expertos, con un incremento de cuatro puntos en el último año.
Así, el porcentaje de los ingresos del hogar necesario para acceder a una vivienda ha crecido hasta el 23,1% en el caso de la compra y hasta el 35,7% en el caso del alquiler durante el último año.
Francisco Iñareta, portavoz de idealista, indica que “el esfuerzo que se requiere a las familias ha vuelto a empeorar debido a la persistente falta de oferta disponible tanto en venta como en alquiler”. Reconoce que los mercados siguen tensionándose cada vez más, presionados por una demanda creciente que encuentra cada vez menos viviendas, lo que incrementa los precios y provoca el aumento del esfuerzo familiar necesario”.
Una tensión <i>in crescendo</i>
Una presión en los precios que no va a disminuir, al menos a corto plazo, asegura Colombelli: “Los problemas de tensión no van a aminorar, sino que seguirán creciendo”.
En este sentido, las agencias inmobiliarias anticipan un nuevo repunte de los precios de las rentas y las compraventas en el próximo trimestre, según recoge la Encuesta de Sensibilidad Inmobiliaria realizada por idealista. Esta subida de precios contrasta con un incremento de los salarios insuficiente para afrontarla.
“Los precios de las viviendas siguen subiendo, también los tipos de interés de los préstamos se han incrementado mucho en los últimos años, sin embargo, aunque el salario medio en España ha repuntado un poco, sigue sin ser suficiente para que una persona con un sueldo normal pueda acceder a una vivienda en propiedad”, afirma el portavoz de iAhorro.