Lío en el PP de Madrid: la mujer de un concejal de Almeida gana su juicio por despido a un Ayuntamiento ‘popular’ tras 21 años como cargo de confianza

David Pérez lo ha sido todo en el PP de Madrid: Diputado autonómico en la Asamblea, portavoz adjunto en el grupo parlamentario, viceconsejero en el Gobierno de Esperanza Aguirre, presidente de la Federación Madrileña de Municipios, alcalde de Alcorcón, consejero de Vivienda y Transportes en el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso y, actualmente, concejal del distrito de Hortaleza en el Ayuntamiento de Madrid que dirige José Luis Martínez-Almeida. Su mujer se llama Elena C. R. y ha trabajado muchísimos años como cargo de confianza con distintos regidores del PP en el Ayuntamiento madrileño de Boadilla del Monte, bastión tradicional del partido de su marido, hasta que, en junio de 2023, fue despedida por el Consistorio que dirige Javier Úbeda.

Ahora, un año después, Elena ha conseguido ganar la demanda por despido. El juzgado de lo social número 2 de Móstoles ha declarado la improcedencia del mismo y ha condenado al Ayuntamiento de Boadilla a readmitir a la trabajadora, abonándole los salarios de tramitación correspondientes desde que decidió interrumpir la relación laboral (a razón de 142′43 euros brutos diarios) o a indemnizarla con la cantidad de 102.549,60 euros si finalmente no vuelve a su puesto de trabajo. Un portavoz del Consistorio boadillense, que prefiere no hacer declaraciones sobre este tema, asegura que la resolución judicial ha sido recurrida ante la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. El asunto ha levantado cierto malestar dentro del complejo ecosistema que es el PP de Madrid, “ya que se trata de un compañero de partido [el alcalde Úbeda] despidiendo a la mujer de otro compañero [el concejal Pérez]”, señalan fuentes del partido.

Elena C. R., licenciada en Ciencias de la Información, empezó a trabajar como cargo de confianza del Ayuntamiento de Boadilla en mayo de 2002, cuando era alcalde Arturo González Panero, alias ‘el Albondiguilla’, condenado a 36 años y 11 meses de prisión por su implicación en la trama Gürtel. Su primer nombramiento fue el de “encargada del Gabinete de la Alcaldía”, puesto en el que duró un año. Entre junio de 2003 y junio de 2011 fue “Jefa de Gabinete de la Alcaldía”. En 2011 llegó un nuevo regidor a la ciudad, Antonio González Terol, que la nombró “Coordinadora de Estudios y Programas” hasta junio de 2015 y después “Coordinadora Técnica de Servicios Sociales y Personas Mayores” hasta junio de 2019. Ese año hubo otro cambio en la Alcaldía. El PP volvió a ganar y el nuevo alcalde, Javier Úbeda, la nombró “Coordinadora de Asuntos Sociales, Familia, Mujer e Infancia”, modificándose la plaza en enero de 2021 a “Coordinadora de Cultura y Mayores”. Tras las elecciones de mayo de 2023, Úbeda (que volvió a ser reelegido) cesó a todo el personal eventual con motivo de la expiración del anterior mandato, decidiendo no volver a contar con Elena.

Este es uno de los argumentos que utilizó el Ayuntamiento en el juicio, que Elena siempre fue un cargo de confianza y, como tal, tras 21 años en distintos puestos de responsabilidad, se decidió no contar más con ella como personal eventual que era. Sin embargo, el tribunal no ha pensado lo mismo, ya que el demandado, es decir, el Consistorio, “llevó a cabo nombramientos no ajustados a la normativa reguladora del mismo, puesto que las funciones encomendadas a la demandante fueron las propias de gestión técnica de la información municipal y actuaciones organizadas por el Ayuntamiento, sin correspondencia con funciones de confianza o asesoramiento especial. Y dicho nombramiento irregular encubre en realidad la presencia de una relación laboral indefinida”. A pesar de que Elena ocupó los puestos de jefa de gabinete y asesora en varias áreas después. El juzgado aclara que se trata de un despido, no un cese, y que como tal es improcedente.

Elena C. R. no solo ha sido trabajadora del Ayuntamiento de Boadilla del Monte. En julio de 2011 fue nombrada miembro del consejo de Telemadrid, puesto que fue ratificado en julio de 2013, periodo en el que la cadena autonómica ejecutó su ERE más traumático despidiendo al 80% de la plantilla. Estuvo en este cargo hasta junio de 2016. Este despido (anulado ahora) no ha sido el único problema judicial que la mujer de David Peréz ha tenido con la justicia vinculado a su relación laboral con Boadilla. El Tribunal Superior de Justicia de Madrid declaró ilegal en el año 2014 la subida de sueldos que este Ayuntamiento había aprobado en 2008. Los salarios de los cargos de confianza de ‘el Albondiguilla’, entre ellos el de Elena, se incrementaron hasta un 23,9%, cuando la Ley de Presupuestos Generales del Estado limitaba los aumentos solo hasta el 3%. La sentencia obligó a los trabajadores implicados a devolver la subida recibida.